La nueva Ley de Tráfico está ya en vigor, endureciendo las multas para algunas de las infracciones e implantando más limitaciones que hagan más segura la conducción por nuestras carreteras. La legislación ha sido adaptada a las nuevas circunstancias sociales y de conducción, y ello sin lugar a duda va a tener una repercusión sobre los conductores y conductoras.

Como todos los cambios, pretenden mejorar la seguridad vial de la ciudadanía como objetivo final, pero podría tener un impacto en nuestros bolsillos de dos formas: por el aumento de las multas y su cuantía, y por el posible impacto de las nuevas medidas en el precio de nuestro seguro.

Obviamente aún es pronto y habrá que esperar un tiempo para ver las consecuencias de todas estas medidas en el precio del seguro del coche. El comparador Acierto.com se ha planteado si el endurecimiento de las sanciones y la llegada de nuevas multas podría afectar a la póliza teniendo en cuenta que podrían multiplicarse las infracciones relacionadas con el móvil, los sistemas de seguridad o los adelantamientos. Son dos los escenarios con los que nos podemos encontrar.

Seguro más caro

El primero de ellos es el encarecimiento de la prima a la hora de renovar el seguro. ¿Por qué? Si se produce un incremento del número de infracciones cometidas y el conductor recurre con más frecuencia al servicio de recurso de multas, el precio podría verse afectado. Eso sí , hay que tener en cuenta que no siempre es posible recurrir una multa: en función de los límites y coberturas contratadas, la compañía nos ayudará informándonos de si cabe el recurso, facilitando los trámites correspondientes, evitando el pago a abogados y trámites legales.

Por tanto en el caso de un conductor que recurriera al servicio de recurso de multas de su seguro con más frecuencia podría encarecer su prima de cara al próximo año.

Seguro más barato

El segundo supondría el efecto contrario: una reducción de la cantidad a pagar por el seguro del vehículo. El comparador cree que algunas de estas medidas (sobre todo las centradas en reducir la siniestralidad y la gravedad de los accidentes) podrían tener un efecto disuasorio en los conductores.

Ponen como ejemplo el cambio en la sanción para aquellos que no usen los sistemas de seguridad (cinturón, casco y SRI): ahora la resta será de 4 puntos. Si este cambio fomenta su uso, a medio plazo se reducirían los accidentes con daños personales rebajando, así, el precio de la póliza: estos son los más caros para las aseguradoras porque, generalmente, hay indemnizaciones de por medio.

Este sería el escenario en el que podrían bajar las pólizas con la nueva normativa al reducirse la siniestralidad, sobre todo en número de los accidentes más graves. Aunque la realidad es que con el incremento de costos de las aseguradoras es muy difícil la bajada de pólizas.