- El secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza, denunció que mientras países como Italia o Gran Bretaña o el FMI han decidido esta semana gravar con un recargo especial a las empresas “que se están forrando con la crisis”, en Euskadi este debate “se oculta y las haciendas rebajan los impuestos a esas compañías”.

En su opinión, esta circunstancia demuestra que en Euskadi “existe un acuerdo de país no confeso entre todos los partidos, desde la izquierda a la derecha, incluido Podemos y EH Bildu” para no subir los impuestos “a quien más tiene y a las empresas que están consiguiendo beneficios históricos a costa de empobrecer a la mayoría”, como son las energéticas y los bancos.

“La izquierda no fuerza el debate de la reforma fiscal, en la práctica no lo considera un tema central y está fuera de su agenda”, criticó en una comparecencia en la que presentó las propuestas fiscales de ELA junto al responsable del Gabinete de Estudios, Mikel Noval. “Esto es aceptar el manual de Feijoó y Ayuso: la política fiscal vasca es claramente de derechas, sin matices”, añadió.

Noval, por su parte, desgranó las propuestas que, según ELA, debería incluir una reforma fiscal y citó un recargo especial del 50% de los beneficios excesivos de las empresas. También abogan porque las compañías contribuyan con, al menos, un 25% de sus beneficios al Impuesto de Sociedades, lo que en el caso de Euskadi supondría recaudar al año 2.300 millones de euros más, que se podrían dedicar a prestaciones sociales.

Según argumentó, la presión fiscal en el País Vasco es del 33,7%, mientras que la media europea se sitúa en el 40,2%. Además, la presión mayor recae en las rentas de trabajo y en los impuestos indirectos (IVA) y citó como ejemplo que desde 2008 a 2021, se han recaudado 879 millones de euros menos en el Impuestos de Sociedades, y en cambio, 1.518 millones más en el IRPF y 1.420 millones más en el IVA.