El precio medio de la luz que abonó un hogar estándar en el Estado español a lo largo de 2021 fue un 5,7 % más alto que en 2018, aunque una vez descontada la inflación acumulada, el importe pagado fue un 1 % inferior, según los datos publicados por la oficina estadística europea Eurostat.

Fuentes del Gobierno han asegurado este martes que estos datos reflejan que se ha cumplido su compromiso de que "la factura final de las familias españolas fuera similar en 2021 y en 2018, descontando la inflación".

Concretamente, los datos de Eurostat sobre precios abonados por los consumidores domésticos medios, con un consumo anual entre 2.500 y 5.000 kilovatios/hora (kWh), reflejan que en el primer semestre de 2021 se pagaron 0,2323 euros por kilovatio/hora (/MWh) y en el segundo 0,2816 /MWh, lo que supone una media anual de 0,257 /MWh. Los datos de 2018 reflejan que el precio en el primer semestre fue de 0,2383 /MWh y en el segundo de 0,2477 /MWh, lo que arroja una media de 0,243 /MWh.

Así, el incremento entre esos dos años fue del 5,7 %, aunque hay que tener en cuenta que entre diciembre de 2018 y diciembre de 2021 la inflación fue del 6,8 %, según datos de Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que quiere decir que en términos reales, el precio medio de 2021 fue inferior al de 2018.

Eurostat publica sus datos siguiendo una metodología homogénea y aprobada en un Reglamento comunitario, y utiliza como fuente la información remitida por las comercializadoras de los precios efectivamente repercutidos a sus clientes.

A finales de 2021, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se comprometió a que el recibo de la luz fuera ese año en promedio similar al que pagaban los españoles en 2018, descontada la inflación, gracias a medidas como la rebaja del 21 % al 10 % del IVA.

En su día Sánchez habló de una rebaja "nunca vista antes", de más de un 60 % de la fiscalidad sobre la electricidad doméstica y explicó que el Gobierno había reducido el 96 % de los costes que dependen de él.