BILBAO. Uno de los portavoces del movimiento de pensionistas vasco, Jon Fano, ha calificado de "insulto a la inteligencia" que el Gobierno español mantenga que la subida del 0,9 % de las pensiones, decidida la semana pasada, garantiza el poder adquisitivo.

Durante la concentración frente al Ayuntamiento de Bilbao, habitual todos los lunes desde hace dos años, Fano ha tachado de "irrisorio" dicho incremento y ha destacado que para las pensiones más bajas supone 6 euros más, por lo que ha afirmado que "resulta fácil entender el cabreo de mucha gente".

"Solo los elementos básicos como la bolsa de la compra, el gas o la electricidad han subido más del 7 %, así que no nos tomen por idiotas", ha mantenido, a la vez que ha asegurado que no les queda otro remedio que "seguir en la pelea".

También se ha referido a la huelga general convocada en Euskadi y Navarra para el próximo día 30 por la Carta Social, en la que se incluye los sindicatos ELA y LAB, y que cuenta con el apoyo de sectores del movimiento de pensionistas.

Según Fano, el movimiento de pensionistas es "plural ideológicamente, pero más del 95 % apoya la huelga", a la vez que ha criticado a CCOO y UGT, y a quienes acusan a ELA y LAB de "poner en peligro" la unidad de este colectivo con el citado paro.

En su opinión, existe "una contraofensiva mediática potente" contra la huelga y también por parte de todos los partidos menos de EH Bildu, que también la apoya.

Sobre el posicionamiento del lehendakari, Iñigo Urkullu, ante el paro y su negativa a recibir a los convocantes, Fano ha considerado que resulta "injustificable y un tanto prepotente y sectario", y le ha recordado que es el presidente de todos los vascos.

También le ha acusado de "mentir" al mantener que el Gobierno vasco carece de competencias sobre la reivindicaciones de la huelga -salarios y pensiones dignas, y derogación de la reforma laboral, entre otras- ya que en la actualidad su Ejecutivo ofrece complementos a las pensiones vía RGI.

En Araba, medio millar de pensionistas han desafiado la gélida temperatura de Vitoria para reivindicar un lunes más ante el Ayuntamiento "un sistema digno de pensiones públicas" y han denunciado que el Gobierno de España no se ha comprometido a "incrementar las pensiones más bajas, acercándolas a los 1.080 euros".

En este sentido, el colectivo ha criticado que los presupuestos del Gobierno Vasco para este año tampoco contemplan ningún aumento de las pensiones mínimas y han explicado que "de haberse aplicado la subida del salario mínimo interprofesional a los 900 euros como se acordó en 2018, el complemento a las pensiones sería actualmente de 1.050 euros".

Los manifestantes han vuelto a reclamar "la subida de las pensiones conforme al IPC real, derogar las reformas de 2011 y 2013, así como las reformas laborales de 2010 y 2012, e incrementar el salario mínimo interprofesional hasta los 1.200 euros", entre otras peticiones, y han vuelto a animar a la ciudadanía a secundar la convocatoria de huelga general prevista para el próximo 30 de enero. EFE