GASTEIZ- La consejera vasca de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, señaló ayer que las medidas que el Gobierno vasco va a tomar para afrontar los nuevos aranceles a productos vascos en Estados Unidos anunciados por Donald Trump, se van a llevar a cabo junto a los sectores afectados porque son los que “realmente conocen cuál es su producto y dónde lo tienen que vender”. Eso sí, la consejera reconoció que el mercado estadounidense es, en cualquier caso, preferente tanto para el sector vitivinícola como para el aeronáutico tal y como le transmitieron las empresas afectadas. “Si hay unanimidad sobre el hecho de que sigue siendo importante EE.UU., vamos a trabajar y de la mejor manera posible”, indicó Tapia.

Este apoyo a los sectores afectados y a seguir en el importante mercado norteamericano es la idea principal que transmitió en el pleno de control del Parlamento Vasco, Arantxa Tapia en respuesta a una pregunta del parlamentario de Elkarrekin Podemos, José Ramón Becerra, sobre los nuevos aranceles que el Gobierno de EE.UU. ha anunciado para una lista de productos europeos en represalia por las ayudas públicas europeas al consorcio aeronáutico Airbus.

Tras la decisión del Ejecutivo vasco de invertir dos millones de euros en un programa de ayudas para el sector vitivinícola para tratar de reducir el impacto sobre el sector por los aranceles, Becerra cuestionó, según Europa Press, la política de internacionalización del Gobierno vasco y afirmó que cree preciso la realización de “cierta autocrítica” por parte del Ejecutivo de Lakua.

El parlamentario de Elkarrekin Podemos criticó que la estrategia vasca de internacionalización incide en aquellos países como China, Reino Unido y EE.UU. que “siendo prometedores, nos están dando la espalda”. Por ello, solicitó hacer una reflexión sobre hacia dónde ir y afirmó “no ver el sentido” a reforzar las estrategias de promoción del sector vitivinícola en EE.UU. “un país que nos está diciendo que no nos quiere”.

Tapia contestó a Becerra que las reflexiones es necesario hacerlas con el sector que es el que “realmente conoce cuál es su producto y dónde lo tiene que vender” y señaló que de sus reuniones con ellos habían concluido la necesidad de seguir en EE.UU., China, “países que realmente son un mercado potencial importante”.

Grupo Rioja El director general del Grupo Rioja, Iñigo Torres, cifró entre 17 y 18 millones de euros el impacto directo de los aranceles de Trump sobre sus exportaciones de vino a Estados Unidos lo que va a “lastrar su competitividad”. Sin embargo, reconoció que la solución “no es salirse” de ese mercado, al que exportan vino por importe de 72 millones de euros anuales, sino “defender la posición lograda, ser más eficaces y buscar alternativas para seguir siendo competitivos allí”.

Para el responsable del Grupo Rioja, donde las 55 bodegas asociadas representan el 70% de la facturación del vino Rioja, el objetivo es poder crecer en un mercado tan relevante como el norteamericano, que tienen mucho potencial y donde hay todavía mucho recorrido donde, además, vendemos a un precio más alto, 6,42 euros el litro, frente al 4,80 de la media”.

Torres expresó la valoración del sector D.O. Rioja con motivo de su intervención en el foro Los viernes de la Cámara que organiza la Cámara de Comercio de Bilbao. - DEIA