El Gernika Rugby Taldea se juega hoy (12.00 horas) su continuidad en la élite del oval estatal. En ochenta minutos de los que dependerá su futuro. Once meses después de lograr el ansiado ascenso a División de Honor, conseguido tras un emocionante duelo ante el Mazabi Santander Independiente; el conjunto foral vuelve a tener ante sí un trascendental partido. Aunque esta vez el objetivo no es tocar el cielo, sino mantenerse en él. Y es que los basurdes han sufrido muchísimo durante su estancia en la máxima categoría, muestra de ello son sus dos únicas victorias; y ahora llegan al último encuentro de la temporada liguera con todo por decidir. Aunque parece que hayan comprado todas las papeletas para el descenso directo. Porque en estos momentos el Gernika ocupa la última posición de la clasificación, la única que te manda derecho a la Honor B. Sin rotondas ni peajes. Sin embargo, los forales tienen una oportunidad para salvarse. Tan solo una, pero se aferran a ella.Porque el Gernika tan solo tiene un punto menos que La Vila, el rival que en la actualidad ocupa la penúltima plaza. Esa cuyo dueño evitaría el descenso directo y se jugaría la permanencia en el play-out ante el segundo clasificado de la Honor B. Es decir, una victoria de los basurdes y una derrota de los alicantinos sacaría al Gernika del farolillo rojo y le otorgaría una nueva ocasión de salvarse. Con todo, en el conjunto vizcaino saben que la gesta se antoja complicada. Y no solo por no depende de sí mismo. Sino porque La Vila parte con ventaja en la tabla y, además, se enfrentará a un rival a priori más asequible. Mientras los alicantinos viajan -también a las 12.00 porque es jornada unificada- al feudo de un Les Abelles que no pelea ya por nada; los gernikarras recibirán al SilverStorm El Salvador, líder de la categoría. Los vallisoletanos se estarán jugando el premio honorífico de terminar la temporada regular como primeros, lo que les permitiría disfrutar del factor cancha en las eliminatorias por el título. La Unió Esportiva Santboiana y el Lexus Alcobendas aspiran a desbancarles del trono, por lo que El Salvador arribará a Urbieta sin permitirse un tropiezo. Con el cuchillo entre los dientes. Por si fuera poca la dificultad, el Gernika todavía no sabe lo que es ganar en Urbieta. Sus dos victorias de este curso -ante el Les Abelles (24-26) y el Complutense Cisneros (31-35)- fueron a domicilio. Así que es hoy o nunca. Asimismo, las últimas cuatro visitas de El Salvador a Urbieta se saldaron con victoria para el equipo visitante, contra el que no ganan desde hace siete años. Es decir, la misión de evitar el descenso tan solo un año después de regresar a Honor se antoja complicada para el Gernika. Porque no solo deberá lograr el primer triunfo en Urbieta de la temporada ante el líder de la categoría, sino que además deberá rezar para que Les Abelles supere a La Vila en el derbi levantino. A pesar de ello, el club foral ha hecho un llamamiento a la afición para que llene el campo porque dicen que los mejores trenes solo pasan una vez. Y el de la División de Honor traqueteará hoy por Urbieta.

Triunfo del Uribealdea

Atento al encuentro de hoy entre Gernika y El Salvador estará el Uribealdea. Los dirigidos por Josu Elortegi ganaron su encuentro de ayer en el campo del Eibar por un escueto 17-18 gracias a un ensayo con transformación a cinco minutos del pitido final. Sin embargo, situados en la antepenúltima plaza de la tabla, el descenso del conjunto foral pondría en peligro su estancia en División de Honor B por culpa de los arrastres.