Galicia tiene algo especial para Santurtzi. Es el lugar de los grandes días y de los botines importantes. Regatas que quedan marcadas en su trayectoria. Este fin de semana en Ares y Moaña no fue una excepción. Los santurtziarras llegaron a territorio gallego con Hondarribia acercándose cada vez más a su liderato y se marcharon acariciando la Corona. Golpe de autoridad en el momento justo. Ayer, la Sotera y aventajó en un punto más a los hondarribitarras, dejando la ventaja en seis puntos con solo dos regatas por jugarse. Los entrenados por Iker Zabala no solo consiguieron la importante ventaja en la clasificación, también llenaron su depósito de confianza con la Bandera de La Concha a la vuelta de la esquina, demostrando una vez más su enorme capacidad de reacción ante las situaciones adversas.

La proximidad de la Bandera de La Concha puede generar distracciones y también llevar a la especulación a algunas tripulaciones que no tienen tanto en juego. No fue el caso de Santurtzi y Hondarribia. Al igual que ocurrió el sábado, no guardaron absolutamente nada. Iker Zabala y Mikel Orbañanos optaron por sacar dos treces sin realizar ningún cambio de un día para otro. Dos alineaciones que ya demostraron que funcionan a gran nivel y en Moaña volvieron a hacerlo, sobre todo, en el caso de los santurtziarras. Esta vez no hubo la emoción del día anterior. La Sotera elevó aún más su propio nivel y creció con el paso de la regata. Una actuación progresiva que confirmó que la confianza del técnico al no hacer ninguna sustitución fue una decisión acertada en lo deportivo.

La Eusko Label Liga es cosa de Santurtzi y Hondarribia. Fueron los dominadores de su primera mitad y en las últimas semanas han elevado el nivel aún más. Cada punto vale mucho y no quieren dejar pasar ni uno. Sin embargo, todavía hay tripulaciones que se resisten a que cada regata se convierta en un monopolio de los líderes de la competición. Orio se está erigiendo como la alternativa más regular en las últimas semanas. Los oriotarras son los únicos entre los siete primeros que todavía no han ganado ninguna jornada, pero llevan una racha importante estando en la pelea. Siempre desde la segunda tanda, a la espera de que un pequeño golpe de suerte alimente sus buenas actuaciones y les de el deseado premio. Ayer, volvieron a repetir esa estrategia. Dominaron la manga y no dieron ninguna opción a Ondarroa, Urdaibai y Cabo. Hicieron su trabajo y durante bastante tiempo la esperanza de conseguir la bandera no fue tan lejana.

Santurtzi y Hondarribia volvieron a romper la tanda de honor a las primeras de cambio, pero esta vez hubo dos variantes que hicieron que la regata fuera diferente. La Sotera fue la encargada de marcar la proa de la regata y la Ama Guadalupekoa sufrió para mantenerse en su estela. También apareció el tiempo de Orio como una amenaza para robar puntos o incluso optar a la bandera. Los santurtziarras bogaron con una ligera ventaja y el viento que fue a más les hizo ir por detrás de los oriotarras en el tercer largo. Aunque una vez hecha la ciaboga, Santurtzi encontró su momento. Los patroneados por Gorka Aranberri elevaron el ritmo y despegaron. Dejaron atrás toda oposición y lograron una victoria clara.

Ante el domino de su rival más directo, a Hondarribia no le quedó otra que tratar de minimizar los daños, perder la menor cantidad de puntos para no quedar tan descolgado de la pelea por la Corona. Lo tuvo que hacer sufriendo. Los hondarribitarras fueron toda la regata por detrás de Orio y solo en el largo final, aprovechando la estela de Santurtzi, que ya ejercía de líder destacado, pudieron rebajar la ventaja y salvar el segundo lugar por escasas centésimas.