A trayectoria de Arraun Lagunak destaca por su paciencia. Sin excesivas prisas y creciendo poco a poco fueron formando una tripulación de mucho nivel. La temporada pasada el covid y los confinamientos no les dejaron exponer todo su nivel, pero este curso llegó el gran salto de calidad. Las donostiarras se presentaron como candidatas a todo desde el primer día. Consiguieron banderas y fueron protagonistas de un bonito duelo con Orio por la Corona de la Liga Euskotren. La Lugañene superó todos los obstáculos y supo sufrir en el fin de semana decisivo para conseguir el primer título de su historia. Ahora, pese a que la celebración liguera siga presente, las remeras de Arraun Lagunak quieren más y mantienen la ambición para tratar de hacer algo grande en la Bandera de La Concha.

Para ganar la primera Corona de su historia, Arraun Lagunak tuvo que sufrir mucho. Los nervios fueron un importante lastre en el último fin de semana de la temporada y el sábado sobre todo sufrieron mucho para salvar el segundo puesto. “Lo pasamos muy mal y con muchos nervios. Se vio que el sábado nos jugaron una mala pasada, pero luego el domingo pudimos estar ahí con Orio. Estamos con pena de no haber ganado la bandera y haber puesto la guinda, pero contentas porque podía haber sido peor y porque tenemos la liga”, declara Andrea Astudillo, que reconoce que en la primera jornada de la Bandera de Zarautz “no nos encontrábamos ninguna”. Su momento más crítico fue el primer largo, cuando fueron claramente por detrás de Donostiarra y Orio, pero fueron capaces de aprovechar sus habilidades en popare para darle la vuelta a la situación.

Sin la Bandera, pero con la Corona en su poder, las remeras de Arraun Lagunak celebraron lo conseguido, aunque todavía sin asimilarlo del todo. “Nos tienen que pellizcar para que nos lo creamos. Es algo histórico”, afirma Astudillo. La patrona galipa llegó a Arraun Lagunak en 2016, cuando el proyecto todavía vivía sus primeros pasos y ahora al mirar atrás se sorprende de la progresión vivida por el club: “Es un poco increíble. Cuando empecé no pensaba que llegaría a estar tan arriba. Luego este año sí que lo veíamos más cerca, sentíamos que lo podíamos tocar con la punta de los dedos. Es un sueño cumplido”.

La victoria de esta temporada empezó a gestarse el curso pasado. Arraun Lagunak formó una buena tripulación, pero la situación vivida con el covid y los dos confinamientos que tuvieron que pasar les lastraron mucho. “Nunca lo vamos a saber, pero si los confinamientos no nos hubieran afectado tanto, hubiéramos estado más fuertes. En el segundo estuvimos a punto de colgar la trainera porque no nos veíamos capaces de levantar la trainera. Este año somos psicológicamente más fuertes, hemos tenido la suerte de no tener ningún positivo y de hacer todo el invierno”, reconoce Astudillo, que apunta a la unión del equipo como otra de las razones del éxito: “Somos todas una piña y eso ayuda mucho. Sí que es verdad que hay gente que lleva muchos años como yo y a las nuevas que llegan se las acoge muy bien. Ahí también está la clave”.

En su caso personal, para la patrona vizcaina la victoria en la Liga Euskotren es otro premio más a la apuesta realizada hace unos años. “Empecé en un club pequeñito como era Zierbena, que no tenía proyecto femenino. Cogí un día las maletas con 16 años y decidí pasar todo el verano fuera solo para remar. Verme ahora donde estoy es increíble. Me ha costado muchos años, hemos tenido que pelear contra muchas cosas y sobre todo contra un montón de trabas. Pero estamos dónde estamos y somos lo que somos”, declara. Ahora, su siguiente objetivo es la Bandera de La Concha y con la Corona ya en su poder su ilusión aumenta aún más: “La Concha son dos jornadas y todo es posible en esas regatas. Vamos con los pies en el suelo, pero con ambición. Hay que mirar para arriba”.

Sanción para Hondarribia. La ACT anuló ayer la decisión tomada por el Juez Único de Competición con respecto a la sanción impuesta a Hondarribia en Galicia y mantiene el castigo de tres segundos que los hondarribitarras recibieron. El proel de la ‘Ama Guadalupekoa’ rompió el remo de trincar en la primera maniobra y lo lanzó al agua. En primera instancia y tras el recurso del club guipuzcoano, se quitó esa penalización pero la asociación no acata el auto. Tras esta decisión, Hondarribia pierde un punto y queda a ocho de Santurtzi.