- Jon Rahm vivió ayer una de esas jornadas que le saben a poco, que ciertamente no reflejan su nivel como jugador. En el turno matinal de la jornada de corte en el PGA Championship, el golfista de Barrika apenas pudo robarle un golpe al campo de TPC Harding Park y poner su tarjeta tras dos días en un escueto uno bajo par. Al cierre de esta edición, figura en el 36º puesto, lo que le llevaba a seguir en liza el fin de semana, pero esta semana tampoco está dando con la tecla de la regularidad en un campo complicado. El liderato provisional estaba en ocho bajo par en manos del chino Haotong Li, que hizo cinco golpes menos con solo cuatro calles cogidas. Les perseguían a dos impactos de distancia Tommy Fleetwood y a tres, Cameron Champ, tras sendas vueltas de seis bajo par. Paul Casey y Brendon Tood también acabaron en -5.

El número 2 del mundo se había pedido a sí mismo "jugar con más agallas" tras el complicado primer día en San Francisco que se vio obligado a manejar a la defensiva. Arrancó ayer con un birdie en el hoyo 10, un par 5, pero no logró que su vuelta cogiera vuelo, pese a la mejoría desde el tee. Apuntaba a ello con los dos birdies consecutivos en el 17 y el 18 que le colocaban en -2, aunque se dejó demasiados golpes en los greenes, como el tripateo desde unos diez metros que le condenó a un bogey doloroso en el 3. En realidad, el juego intermedio no brilló y muchos de sus putts quedaban a distancias lejanas y, bien tirados después, nunca terminaron de entrar en el agujero, salvo contadas excepciones.

Lo mejor del día fue el hoyo 7 en el que un magnífico golpe de salida le dejó la bola en el borde de green y estuvo cerca de lograr el eagle. Se anotó un birdie, pero el bogey en el hoyo siguiente tras un primer golpe que se pasó de largo el green confirmó que tampoco ayer era la jornada esperada. Ahora queda encontrar la buena onda, poner en orden todos los segmentos del juego, en el día del movimiento en busca de progresar en la clasificación en un torneo en el que varios nombres importantes pugnaban por las primeras posiciones y otros, como los mismos Justin Thomas y Rory McIlroy, buscaban pasar el corte. Quien se pierde el fin de semana, una vez más en un major, es Sergio García, que hizo ayer +6. Peor le fue al cacereño Jorge Campillo, que firmó 80 golpes, diez sobre par en una jornada aciaga.

La vuelta tras el coronavirus está siendo una montaña rusa para Jon Rahm y tampoco este PGA Championship está rompiendo esta tendencia, al menos antes del fin de semana. Que el de Barrika no está a gusto en el campo ni con su juego lo demuestra su gesto de frustración en el hoyo 14 cuando, tras ser molestado por un operador de cámara en uno de sus golpes, se colocó en el tiro del objetivo, lo cual le generó algunas críticas.

En el Circuito Europeo, se está disputando el English Championship en el recorrido de Hanbury Manor y el donostiarra Adrián Otaegui llega al fin de semana igualado en la quinta posición y a tres golpes del líder, el inglés Andy Sullivan. Por su parte, la navarra Carlota Ciganda cerró la segunda jornada del Marathon LPGA Classic en la octava plaza y a seis golpes de la neozelandesa Lydia Ko, ex número 1 del mundo.