la eliminatoria de Copa que enfrentará mañana a Portugalete y Betis en La Florida tiene un significado especial para Roberto Ríos (Bilbao, 1971), quien encuentra motivos suficientes para sentirse unido a uno y otro bando en caso de echar un vistazo a su pasado. El que fuera central del Athletic entre 1997 y 2002 tras convertirse en el fichaje más caro en la historia del club rojiblanco como consecuencia de los 2.000 millones de pesetas que abono el club bilbaino al Betis, se hizo futbolista bajo la disciplina verdiblanca, pero ni mucho menos olvida que vivió y degustó de pequeño el aroma de Portugalete, lugar de nacimiento de su padre Eusebio, fallecido en 2008, y donde residió en distintas etapas de su infancia. Se trata, por tanto, de un cruce que cala profundamente en el segundo entrenador de la Unión Deportiva Las Palmas, destinada a medirse a domicilio al Badajoz dos horas después del inicio del choque en La Florida, de cuyo desenlace advierte que estará pendiente Ríos antes del comienzo del encuentro en el Nuevo Vivero.

"Nuestro partido empezará a las 18.00 horas, así que echaré un ojo para saber qué ha pasado en La Florida, donde estará mi familia", desvela el bilbaino, quien reconoce que le hizo "mucha ilusión" que el sorteo emparejara al Betis con el Portugalete, si bien "yo estoy en Las Palmas y seguí el sorteo con la ilusión de que nos pudiera haber tocado a nosotros". "Aun así, lo cierto es que para el Portu es más atractivo que vaya el Betis, porque para equipos de menor categoría es un gustazo poder enfrentarse a este tipo de rivales. Permiten hacer una buena taquilla en medio de un gran ambiente de fútbol y eso se lo va a dar seguro el Betis", destaca Ríos, convencido de que esta vez "el premio gordo se lo ha llevado el Sestao con el Athletic, pero no siendo algún equipo de la zona, diría que el mejor rival posible era el Betis".

El conjunto dirigido por Joan Francesc Ferrer, más conocido como Rubi, visitará tras su último empate en liga en Mendizorrotza (1-1) La Florida, donde el excentral de Betis y Athletic guarda buenos recuerdos relacionados con su infancia, toda vez que "cuando mi padre no entrenaba, algunas veces nos acercábamos al campo a ver partidos del Portu. Nos pillaba muy cerca de casa, donde vive mi madre y cerca de donde mi hermana, aunque aquello ha ido cambiando, porque entonces había allí una campa, luego hicieron parques y todo ha ido evolucionando". "Incluso con el Athletic fuimos a jugar a La Florida un partido amistoso en julio de 2001. Fue bonito para Julen Guerrero y para mí al ser los dos de Portugalete, aunque yo estuve poco allí. Aun así, Portu era nuestra base familiar por decirlo de alguna manera, porque cuando mi padre no trabajaba, solíamos estar allí como decía antes, al igual que cuando entrenó al Barakaldo, por ejemplo", relata el vizcaino, a quien el Betis, por su parte, le ha dado "todo".

"Me he criado allí como quien dice y estuve también seis años como entrenador", recuerda con orgullo Ríos, quien no esconde que "yo soy del Betis, pero el Portu, al igual que el resto de equipos de categorías inferiores, sueña con llegar a este momento y tendrá una motivación extra mañana". "Aunque sepan que será muy difícil pasar la eliminatoria, seguro que no van a dar el partido por perdido al ser una ilusión para ellos, mientras que para el Betis es una obligación ganar. Ocurre lo mismo con el Athletic y el Sestao".

UN "GRAN" AMBIENTE En cuanto a los decibelios de La Florida, Ríos tiene claro que el Betis se encontrará en Portugalete con un "gran ambiente", pues "habrá una muy buena entrada seguro y será un partido bonito de ver". "El Betis será bien recibido, pero como no esté atento, se le puede complicar la eliminatoria", advierte un hombre con poderosos lazos de unión respecto a una eliminatoria en la que el Portugalete sueña con dar la campanada.