Bilbao - Sin apenas tiempo de asimilar el triunfo, con sueño por las poco más de tres horas que el tempranero viaje de vuelta Inglaterra le permitió dormir, Núñez, sonrisa de oreja a oreja, atiende a DEIA en Bilbao.

¿Qué le viene ahora a la cabeza al pensar en este título?

-Siento que el trabajo que hemos hecho hasta ahora se ve recompensado. Ya habíamos quedado segundos, que es muy difícil. Sin embargo, ganar te hace valorar mucho más el esfuerzo y me siento en una nube.

¿Sienten que se han quitado una espina al lograr vencer por fin en una final?

-Sí. De hecho cada jugador o persona del club lo celebró con esas palabras: Por fin. Es como un peso que nos hemos quitado de encima ya que las finales estaban siendo un déjà vu. Si volvemos a jugar una final, que espero que sí, iremos con la presión de ganar otro título, no con esa barrera de que sea la primera vez. Vamos a intentar aspirar a lo máximo, pero con algo menos de presión.

¿Tuvieron una presión añadida debido a esas ganas de querer estrenar su palmarés?

-Creo que más que presión, teníamos miedo a perder otra final. El sueño del club siempre fue ganar un título, independientemente de cual fuera. Pero al haber estado tan cerca muchas veces y perder esos partidos importantes, no queríamos perder otra final después de lo que nos había costado llegar hasta ahí.

¿Las experiencias previas les ayudaron ante el Besiktas?

-Creo que sí. Es cierto que solo seis jugadores jugaron en pista, pero otras veces, por nervios o falta de experiencia, había jugadores a los que les costó entrar en el partido y que quizás no mostraron su nivel real. El domingo, los seis que estuvieron en pista jugaron espectacular. No hubo nadie que desentonase ni nadie que estuviese por debajo de su nivel. Eso es gracias a la experiencia acumulada y el saber estar en los momentos clave.

¿Cómo vivieron esa final desde dentro?

-Creo que nosotros desde el principio salimos con más ganas de ganar que ellos. Ellos tenían una plantilla más larga, con muchas puntuaciones intermedias y eso les daba mucha variabilidad. Pero desde el primer cuarto ya vi que sin jugar exactamente a lo que queríamos, íbamos por delante. En el segundo cuarto, cuando empezamos a presionar, vimos que les costaba. Nos fuimos de unos ocho puntos y vimos que si hacíamos las cosas bien teníamos todas las probabilidades de ganar.

Una de las claves fue apostar por un quinteto pequeño...

-Así es. La consigna fue intentar que llegaran a su triple con pocos segundos y que tuvieran solo una opción de tiro precipitada y en cansancio. Sacrificar centímetros a ratos, pero imprimir mucha velocidad. Eso nos funcionó prácticamente todo el tiempo. Muchas veces no es cuestión de altura, sino de intensidad.

Dominaron hasta los últimos minutos, pero entonces un triple final acercó al Besiktas a solo un punto. ¿Qué le pasó por la cabeza?

-En realidad lo único que pensé era en el tiempo que quedaba y en tratar de tener un buen tiro en nuestra posesión. Nos quedaban faltas por hacer, por lo que incluso fallando podíamos hacer falta. No sentí una especial ansiedad porque estábamos jugando bien, nos habían metido un triple de ocho metros bien defendido y nos tocaba atacar. Seguíamos ganando y la presión la tenían ellos. Luego, logramos un tiro cómodo de Tom y lo metió.

¿Qué supone este título para el club?

-Es título es el reflejo del trabajo que se viene haciendo desde varios años. De la filosofía del club de contar con gente de la casa y reforzar con ciertos jugadores internacionales. Hace años el club tuvo problemas económicos y hubo mucha gente que peleó para que no desapareciese. Esa gente, la que trabaja en las escuelas, en la gestión de los viajes? hay muchas personas que trabajan para que este club vaya adelante y aunque algunos no formen parte del equipo jugando, también son parte de este título y ganar premia a todos los que están ahora y estuvieron anteriormente.

¿Cómo se plantea el final de temporada?

-Ahora tenemos otro título en juego. Solo hay que jugar dos partidos para lograrlo, pero vaya dos partidos. Pero ahora toca disfrutar de este título y de todo lo que conlleva. Descansaremos hasta el jueves porque ha sido mucha carga física, pero el jueves empezaremos a preparar esa semifinal contra el Albacete.

Los precedentes son buenos ante ese rival.

-Así es. De hecho tenemos una semana más que ellos para preparar el partido porque juegan la Champions. Trataremos de repetir lo que hemos hecho en liga para intentar pasar a la final y buscar otro título. Aunque lo haremos con un poco menos de presión ya que hemos conseguido el primero y ahora toca ir a por el segundo.

¿Les da confianza la Euroliga 1 lograda?

-Muchísima. Los propios jugadores mencionan que ya no hay esa necesidad de tener que ganar. Ahora vamos en una dinámica súper positiva y queremos ganar la liga.