KrakenLos señores del tiempoAquitaniaEl silencio de la ciudad blancaEl libro negro de las horas

Hoy los escenarios principales de la primera novela siguen siendo objeto de concurridas visitas guiadas por la capital alavesa, recorridos que alguna vez en estos años ha conducido la propia escritora. A partir de la publicación de esta cuarta entrega habrá, eso sí, que ampliar el radio de acción. Por ejemplo, hasta Betoño, donde se ubica la sede de la Fundación Sancho el Sabio. Allí, en el edificio construido en el cementerio de las Madres Carmelitas, van a transcurrir muchas escenas de la nueva historia.

A pesar de que se recupera tanto al protagonista como a buena parte del universo creado por la escritora en torno a su conocido personaje, para asomarse a El libro negro de las horas no es necesario haberse leído de manera previa la Trilogía de la Ciudad Blanca. Tampoco haber estado en la Caja de las Letras del Instituto Cervantes, aunque este emplazamiento -que guarda en sus cajas de seguridad más de 60 legados de artistas de relevancia- también tiene su importancia en la trama que está a punto de encontrarse con los lectores. Por lo menos, a este lado del Atlántico, porque será en marzo cuando la novedad llegue, en formato físico, a países como Argentina, Uruguay, Chile, Colombia, México y Perú.

Mientras Aquitania sigue su exitoso recorrido -acaba de ser traducida al serbio y al griego-, la nueva novela vuelve al universo de Kraken justo en este 2022. El protagonista -que incluso ha dado el salto a la gran pantalla con la versión cinematográfica de El silencio de la ciudad blanca- recibe una llamada anónima que cambiará lo que cree saber de su pasado familiar: tiene una semana para encontrar el legendario Libro negro de las horas, una joya bibliográfica exclusiva, ya que de lo contrario su madre, que paradójicamente descansa en el cementerio desde hace décadas, morirá. Así comienza una carrera contrarreloj entre Gasteiz y Madrid para trazar el perfil criminal más importante de la vida de López de Ayala, capaz de modificar su pasado para siempre.