El británico Harry Macqueen compite por la Concha de Oro en Donostia con su segundo largometraje, Supernova, una película de amor romántico que habla de la vida y la muerte desde el microcosmos intimista de una pareja homosexual interpretada por Colin Firth y Stanley Tucci.

“Para explorar estos temas de tanta envergadura, hay que hacerlo desde un punto de vista microscópico”, aseguró ayer en rueda de prensa el realizador y también actor, que ha dejado recaer la “universalidad de esta experiencia humana” en solo dos intérpretes para que todo discurra “de manera natural, no forzada”.

Ha elegido a dos actores que además son amigos para contar el viaje que Sam (Firth) y Tusker (Tucci) emprenden para encontrarse con familiares y amigos en el momento en que sus vidas están empezando a dar un giro inevitable a causa de la demencia prematura que padece el segundo.

Ese road trip en una autocaravanaroad trip mostrará cómo el amor que se profesan desde hace veinte años no se ha deteriorado, pese a lo cual hay secretos y planes que Tusker ha ocultado a Sam.

Macqueen (Leicester, 1984) explicó que pensaron que uno de los miembros de la pareja tenía que ser extranjero -no necesariamente estadounidense como así ha sido- y que, tras contactar con Tucci, fue éste el que les sugirió a Colin Firth.

“El proceso fue maravilloso. Se conocen desde hace años y se quieren. Ya tenían una química como seres humanos que había que trasladar a la película”, dijo el director británico, que ha estado acompañado por los productores Emily Morgan y Tristan Goligher.

Comentó además que, como actor, Firth y Tucci le han aportado mucho. “No puedes evitar trabajar con personas tan brillantes y no aprender en el proceso. Ha sido una gran recompensa la confianza que tenían en mí”, aseguró.

“He aprendido muchísimo de los dos y estoy encantado de que hubiera entre ellos una relación preexistente”, añadió.

experiencias personales

Macqueen ejerce asimismo de guionista en este filme, que ha nacido de “muchas experiencias personales” y de un “largo y profundo proceso de investigación” sobre la demencia prematura. Señaló ayer en Donostia que durante años ha estudiado esta enfermedad y se ha entrevistado con personas que la padecen o familiares de enfermos que la sufren. “Ha sido la experiencia más conmovedora que jamás haya vivido”, ha subrayado.

“Es una película madura acerca del amor en un momento determinado de la vida. No muchas películas de ese género abordan este periodo, cuando tienes 50 o 60 años”, apuntó Macqueen.

En este caso, además, ha optado por una pareja homosexual. “Hacer una película es un acto político ‘per se’. Cuando más normalicemos las cosas, todos estaremos en un mundo mejor”, aseveró. Cree que “a veces es importante hacer ese tipo de gestos” y él está “muy orgulloso de haber marcado ese hecho” al decidir que la pareja de Supernova sea homosexual.

El director británico explicó que el título de esta cinta hace referencia al personaje que interpreta Tucci, amante de la astronomía, que se está acercando a la muerte como una supernova, “una estrella que al final de su vida explosiona y es una de las cosas más brillantes que puedes observar”.

“El filme nació de un largo proceso de investigación sobre la demencia prematura”

Director de cine y actor