I sus piedras hablaran... Contarían cómo por aquel entonces un joven arquitecto Ricardo Bastida proyectó su construcción en 1905 en pleno centro de Bilbao y cómo el edificio fue inaugurado en 1909. Y cómo diez años después de su inauguración sufrió un terrible incendio que tardó varios días en sofocarse, por lo que tuvo que ser parcialmente reconstruido. Posteriormente, durante la Guerra Civil fue utilizado como refugio y como almacén de arsenal militar.

Tras la finalización del conflicto, la Alhóndiga alcanzó su máximo apogeo llegando a acoger hasta a seiscientos trabajadores repartidos entre sus cuatro plantas. En la década de los sesenta su actividad entró en declive debido a las leyes tributarias de consumo de la época, hasta que en 1977 fue clausurada.

Se barajaron muchas opciones, incluso se ofreció como sede del Guggenheim Bilbao. En 1988 el entonces alcalde José María Gorordo propuso impulsar un proyecto cultural para recuperar la Alhóndiga. El elegido para llevar a cabo el proyecto del Centro Cultural de la Villa de Bilbao, como se iba a llamar, fue el escultor Jorge Oteiza, quien formó equipo de trabajo con Juan Daniel Fullaondo y Sáenz de Oiza, y contó también con la colaboración de Rafael Moneo.

Se barajó como sede del Guggenheim Bilbao. Oteiza y Sáenz de Oiza presentaron también otro proyecto.

Juntos presentaron un proyecto basado en un gran cubo acristalado de 80 metros de altura en pleno centro de Bilbao que convertiría la antigua Alhóndiga en una factoría de arte cercana al ciudadano donde también se ubicaría la Biblioteca Foral, el Conservatorio de Música y el Museo Vasco de Arte Contemporáneo. Finalmente, no salió adelante.

La Alhóndiga resucitó el 18 de mayo de 2010resucitó, después de nueve años de obras y una inversión de 71 millones de euros, convertida en un centro de ocio y cultura, con la intervención del diseñador francés Philippe Starck. En 2004, Starck se enamoró del proyecto y de la ciudad a primera vista. Su reto fue humanizar la construcción y convertirla en un nuevo punto de referencia de la vida ciudadana.

Y lo consiguió. Azkuna Zentroa (AZ) -como se denomina a la Alhóndiga desde 2015, en recuerdo al primer edil fallecido un año antes-, es un espacio dedicado a la creación y a la cultura contemporánea "en el más amplio sentido de la palabra, un espacio de creación y consumo, de encuentro y debate, abierto, dinámico y creativo", según recordaba recientemente el lehendakari Urkullu en una visita al centro por su décimo aniversario.

Puertas abiertas

La celebración de estos diez primeros años se ha tenido que atrasar por motivos de la pandemia y será hoy, cuando a las doce del mediodía, se celebrará un acto institucional con motivo del décimo aniversario del centro, en el que participará el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto; el concejal de Cultura, Gonzalo Olabarria, y el director del centro, Fernando Pérez. Por la tarde, se realizará una jornada de puertas abiertas, de 17.00 a 21.30 horas, en la que los artistas residentes mostrarán al público su forma de trabajar.

Según informó recientemente el alcalde, durante sus diez años de funcionamiento, el centro ha acogido más de 560 actividades artísticas, de ellas, 42 exposiciones, en las que han participado más de 2.000 artistas locales e internacionales. Y ha contabilizado más de 40 millones de tránsitos de personas por sus instalaciones, de los cuales 3,6 millones se registraron en 2019. De estos, 1,1 millones participaron en alguna de las actividades culturales, deportivas, educativas o recreativas que se desarrollan anualmente en sus instalaciones. "Este año Azkuna Zentroa cumple 10 años, una efeméride que nos invita a reflexionar sobre todo lo que este centro ha conseguido en este tiempo, el cambio que ha supuesto para Bilbao, para el entorno, y para la vida y la imagen de la ciudad. Y, cómo no, para toda Euskadi. En especial, la Euskadi creativa, cultural y turística", recordaba recientemente Aburto.

Acuerdo con la UPV

Coincidiendo también con este aniversario, ayer AZ y la Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea firmaron un convenio de colaboración a través de actividades de formación e investigación, con seminarios y trabajos de estudiantes de Bellas Artes relacionados con el centro.

La rectora de la UPV, Nekane Balluerka, y el alcalde Juan Mari Aburto.

La firma de este acuerdo, que fue ratificado por parte del alcalde de Bilbao y presidente de Azkuna Zentroa, Juan Mari Aburto, y la rectora de la UPV/EHU, Nekane Balluerka, supondrá la coordinación de la programación cultural de ambas entidades, y fomentará la colaboración en el ámbito audiovisual, de las artes plásticas, visuales y escénicas, en la arquitectura y en el pensamiento. Así, durante los próximos cuatro años, desarrollarán en conjunto trabajos académicos de estudio e investigación en el ámbito universitario, a través de Trabajos Fin de Grado, Trabajos Fin de Máster y Tesis Doctorales.

También se pondrán en marcha programas de formación en colaboración como seminarios y títulos propios de máster.