parís. La Federación Francesa de la Costura informó ayer de que el diseñador italiano Giambattista Valli había recibido la apelación de alta costura, por lo que en los desfiles que se presentarán el próximo mes de enero podrá presentar su colección como miembro de pleno derecho de ese exclusivo grupo de creadores.
La decisión se tomó el pasado viernes en una reunión mantenida por la cámara sindical, indicó la federación en un comunicado, en el que precisó que el diseñador mostró por primera vez en la pasada temporada sus creaciones como "miembro invitado" en el calendario de la alta costura.
En Francia, dicha calificación es una apelación jurídicamente protegida que responde a un número de criterios específicos, principalmente en lo que respecta a la elaboración a mano del trabajo, a que se trate de piezas únicas a medida o al número de empleados de las respectivas casas.
Otras de las escasas firmas que producen exclusivas creaciones de alta costura para la pasarela parisina son Christian Dior, Chanel, Jean Paul Gaultier o Givenchy.
Valli, cuya firma tiene sede en París, nació en Roma hace 45 años y estudió en la Escuela de Arte de esa ciudad, en el Instituto Europeo de Diseño y en la reputada Saint Martin School of Arts de Londres.
Según la trayectoria profesional facilitada por su página web, en su currículo destaca su trabajo en la casa Fendi en 1990 o en Emmanuel Ungaro a partir de 1997, así como la creación en la capital gala en 2005 de su propia colección.
De sus diseños, los expertos aseguran que Valli apuesta por "siluetas subidas de tono y por formas glamourosas" que hacen de la mujer una femme fatale.
Además de ser un creador reconocido de ropa, Valli también ha hecho sus pinitos en la perfumería y en el diseño de móviles, como el que presentó para la marca Nokia en 2007. En aquella ocasión, creó un modelo rosa y otro negro con el que trató de reinterpretar el glamour en la telefonía móvil.