La comarca de Uribe, a través de la ADR Jata-Ondo, su ente de gestión turística comarcal, ha pasado a formar parte de la red de Destinos Turísticos Inteligentes (DTI). En concreto, el programa Destino Turístico inteligente es un proyecto promovido por la secretaría de Estado de Turismo (SETUR) y gestionado por la Sociedad Mercantil Estatal para la Gestión de la Innovación y las Tecnologías Turísticas (SEGITTUR), que persigue contribuir a mejorar la competitividad de los destinos turísticos y la calidad de vida de sus residentes incidiendo en cinco ámbitos de actuación: gobernanza, innovación, tecnología, sostenibilidad y accesibilidad.

De esta manera, la comarca de Uribe accede a un selecto club que define a sus integrantes como "un destino turístico innovador", consolidado sobre una "infraestructura tecnológica de vanguardia", que garantiza el desarrollo "sostenible del territorio turístico", accesible para todos, facilitando "la interacción e integración del visitante con el entorno e incrementando la calidad de su experiencia en el destino y la mejora de la calidad de vida del residente", explican.

En este sentido, entre las trece nuevas instituciones que se unen a la Red DTI se incluyen Incidbe, la agencia de turismo del Goierri, la asociación de desarrollo rural Montes y Valles Orientales, la asociación desarrollo rural Mariñas- Betanzos, la asociación para la promoción turística de la Axarquía, el centro de iniciativas y turismo del nordeste de Tenerife, el consorcio de promoción turística costa del Maresme, el consorcio de turismo Ribeira Sacra y la fundación Camino Lebaniego. A ellos hay que añadir el GDR Ulla Tambre Mandeo; Jata-Ondo, asociación de desarrollo rural de la comarca Uribe; ruta del Vino Rioja Alavesa y la sociedad Mixta de Turismo de Ferrol.

Sobre esta línea, el programa DTI promueve la implantación de un modelo de gestión que tiene en cuenta la "transversalidad de la actividad turística y las características diferenciadoras de cada destino". Se articula sobre una metodología de diagnóstico, que deriva en un sistema de recomendaciones, un plan de acción y un sistema de monitorización, que conforman los elementos fundamentales del modelo, permitiendo un proceso de mejora continuo de la gestión adaptada a los retos presentes y futuros del turismo.

Finalmente, la red de Destinos Turísticos Inteligentes es una herramienta de coordinación y cooperación y, al mismo tiempo, un instrumento integrador, de la que forman parte desde los diferentes niveles de administraciones públicas implicadas a sector privado y académico. En definitiva, todos aquellos que por su conocimiento y ámbito de trabajo pueden aportar valor al desarrollo de los DTI.