La plaza Meatzari de Muskiz se convirtió ayer, en el marco de la III edición de la Eguzki Fest de Muskiz, un singular escaparate para la exhibición de diferentes líneas de producción artesanal así como para dar a conocer diferentes iniciativas generadas en el entorno de las Encartaciones y de otras comarcas vizcainas alrededor de la moda y la generación de proyectos singulares relacionados con este sector. Es el caso de la mayoría de las empresas participantes en la feria Eguzki Fest de Muskiz, para las cuales la cita "es una importante oportunidad para dar a conocer nuestros productos a un público heterogéneo", señalaron algunos de los expositores que participan en esta nueva edición del certamen muskiztarra que tendrá hoy su continuidad con actos expositivos, catas, talleres y animación musical en el entorno ferial. "La verdad es que ser autónomo en un mundo tan complicado como la moda es un acto de profunda implicación personal. Todo lo demás es una lotería en la que las instituciones aún no se han implicado de un manera resolutiva", apuntó una de las promotoras en la feria muskiztarra que significó el importante papel que juegan este tipo de ferias en la promoción de los proyectos de cercanía.La feria Eguzki Fest comenzará su segunda jornada a las 11.00 horas en la carpa A, ubicada en la zona de carpas del recinto festivo de la plaza Meatzari, con una demostración de pan artesano mientras que a las 12.00 horas habrá una cata de vermuts y vinos especiales y un cata de vinos blancos con salchichas a partir de las 13.30 horas. Paralelamente, en la carpa habilitada en el hall del Meatzari Aretoa habrá a las 11.00 horas un taller sobre Cafés de especialidad, mientras que las 12.00 horas se pondrán en marcha uno de los talleres que ha gozado de una mayor proyección dedicado a la propuesta Navegando por el Duero, que pretende acercar a Euskadi la riqueza de esta denominación de origen calificada.

La jornada dominical se completará con una cata de cafés de especialidad, una degustación de vermuts y vinos especiales, vinos blancos con salchicha y ostras con vinos espumosos. Paralelamente en el recinto ferial habrá oportunidades gastronómicas como los helados artesanales, la galletas primaverales o la mousse de chocolate o mini tartas de frutas y flores. Además habrá animación musical a las 13.00 horas con Clásicos del Pop.

Valentía

Uno de las peculiaridades de la cita Eguzki Fest es la oportunidad de dar a conocer a determinados artesanos tanto de las Encartaciones como de Ezkerraldea y Meatzaldea u otras comarcas de Bizkaia que "hayan hecho de la producción artesanal su seña de identidad" remarcaron desde Enkartur, entidad impulsora de esta cita en la que han estado presentes un decena de artesanos que han decidido dar el paso para convertir sus iniciativas personales en un modelo de negocio que por lo general se basa en la creatividad, el diseño propio y una voluntad de hierro para poner en valor su producto, en los que la política Km0 es un factor preponderante. "Nos gusta pensar que lo clientes que hacemos se convierten en prescriptores de nuestra marcas", valoraron.

Es el caso de marcas como la de Susana Santos o Lágrimas de Cocodrilo, partícipes del proyecto Lotune -reconocido por Gobierno vasco como innovador en la gestión comercial- que ayer comparecieron en Muskiz con su singular línea de bolsos fabricados con telas en las que toman relevancia la recuperación y el reciclaje de productos y un diseño singular y Lágrimas e Cocodrilo, una firma que ha hecho de sus estampados y los adornos se sus prendas -especialmente camisetas- su marca de identidad. "No te voy a decir que esta apuesta es morir de amor ya que al fin y al cabo es una idea que nos apasiona pero lo cierto es que es muy complicado salir adelante. Te tienes que distinguir en materiales, en calidad, en el trato directo con el cliente. Son aspectos que generan una relación con el cliente al que si entra por segunda vez le llamas por su nombre", proclama Susana, una de las cuatro artesanas de la moda que participan en el proyecto bilbaino Lotagune que ofrece una serie de infraestructuras comunes a estas emprendedoras.

No han gozado del mismo apoyo institucional emprendedoras como Idoia Aloria, licenciada en Empresariales, que vivió en Venecia y volvió a su tierra, ya que su madre es de Muskiz, convencida de que su habilidad para la bisutería de calidad podía ser una buena salida profesional. Idoia propietaria de la marca Ciaobellaido está especializada en bisutería femenina "con diversos baños en oro y sobre todo con la realización de piezas con resinas y piedras naturales como ónix, ágatas o cristal de Murano. Nuestra apuesta fundamental es dotar de color a este complemento que ofrecemos a través de la venta on line".

"Salir adelante es difícil porque aquí a los autónomos no se nos valora más que como fuente de impuestos cuando poner en marcha una actividad supone un esfuerzo importante", subrayó esta mujer que lleva seis años dedicada a este negocio y que comparte con el resto de autónomos artesanales la falta de reconocimiento institucional a su desempeño profesional. "Nos enfrentamos a gigantes y nuestro costes no pueden competir con ellos salvo en la originalidad y la calidad de nuestro producto", insistió.

La originalidad es otro de los pilares de la empresa balmasedana Doserre Atelier que desde hace poco más de un año intenta abrirse camino en Instagram (@doserre_atellier) con una producción a medida de prendas de vestir a través de varias colecciones colgadas en su red social. "Cualquiera que vea nuestros diseños o propuestas -unas 10 o 12 por colección - puede encargar el modelo que está presente o bien puede contactar con nosotras para adaptarlo a sus necesidades o medidas", afirmó Julene Rosales una de las socias de esta joven empresa que también cuenta con la de posibilidad de llevar a cabo estampaciones en las prendas. l

"La artesanía de la moda es morir de amor. Es algo que te gusta pero que te mata a impuestos "

Emprendedora