El Tribunal Supremo ha rechazado el recurso de casación que interpusieron el Ayuntamiento de Santurtzi y el colegio Hijas de La Cruz ante la sentencia que indica que el Consistorio debe cambiar el uso del suelo sobre el que se alza el centro, de uso educativo a uso residencial. Esto supone un nuevo paso más en el contencioso en el que llevan inmersos quince años la institución local marinera y la constructora que adquirió esta parcela a los herederos de Cristóbal Murrieta, quien creó la fundación que rige el centro educativo santurtziarra. El auto del Supremo devuelve la pelota al tejado del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, instancia que ya falló a favor de la empresa constructora que quiere crear viviendas de lujo en el solar de Hijas de La Cruz. "Judicialmente, es obvio que se trata de un resultado que no es favorable a la voluntad del pueblo de Santurtzi. Aun así, el Ayuntamiento continuará trabajando con el fin de encontrar la mejor solución para nuestro pueblo e intentar impedir especulaciones urbanísticas, tal y como hemos venido haciendo desde el primer momento", declaró el Ayuntamiento de Santurtzi en un comunicado.

El efecto más inmediato de este fallo judicial sería la obligación de que el Consistorio marinero admita a trámite el estudio de detalle del proyecto de la constructora, un estudio en el que no se define el número de viviendas que se construirían, sino que especifica tan solo las alineaciones y rasantes de edificios. "La obligatoriedad de admitir a trámite dicho estudio de detalle no significa tener que aprobarla de forma inicial obligatoriamente, más si cabe teniendo en cuenta la actual situación del PGOU de Santurtzi, en el que las tramitaciones de las licencias urbanísticas se encuentran suspendidas temporalmente, por estar este en revisión", declararon desde el Consistorio. En este sentido, la institución local santurtziarra sigue firme en su propósito de "defender hasta el último centímetro" del colegio Hijas de La Cruz y lo hace, además, con el apoyo de la ciudadanía que desde el comienzo de este caso se ha posicionado masivamente en favor de la pervivencia del colegio en sus actuales instalaciones. "Durante todo este tiempo la postura del Ayuntamiento ha sido siempre la misma: asegurar este espacio tan valioso, situado en el centro del municipio, para que la ciudadanía santurtziarra lo pueda utilizar y disfrutar. De ahí que nuestro objetivo haya sido siempre intentar blindar el suelo para asegurar su uso dotacional y no permitir la construcción de viviendas de lujo. La perseverancia y la lucha de la ciudadanía santurtziarra y del Ayuntamiento han hecho que ese solar no esté copado de cemento desde hace quince años.", aseguró el Ayuntamiento en su comunicado.

El proyecto educativo sigue

El auto del Tribunal Supremo es un varapalo para el colegio Hijas de La Cruz, centro que lamentó que "la Justicia dé la espalda a la voluntad popular del pueblo de Santurtzi y priorice los intereses de un constructor frente al uso educativo centenario que se viene ejerciendo para los niños y niñas desde hace más de 160 años". Pero el proyecto educativo de Hijas de La Cruz seguirá adelante pese a este serio obstáculo, ya que tal y como informaron desde el propio colegio, "el centro está trabajando discretamente desde hace casi dos años para trasladar el proyecto educativo de Hijas de La Cruz a otra ubicación dentro del casco urbano de Santurtzi, con el objetivo de continuar su actividad".