Habría que imaginarse una pared de piedra que podría alcanzar los cuatro metros de altura -el doble de lo que se puede observar hoy- y los tres de anchura, así como una empalizada de madera para impresionar y disuadir a posibles enemigos y también para protegerse de ataques, desde su estratégica ubicación a 320 metros de altura, dominando el valle. Es en ese punto de la muralla, donde el Ayuntamiento de Zalla y la Diputación Foral de Bizkaia continuarán con la rehabilitación del castro de Bolunburu, “uno de nuestros tesoros patrimoniales”, según destacó el alcalde, Juanra Urkijo, cuya declaración de Bien Cultural de Protección Especial con la categoría de zona arqueológica aprobará el Gobierno vasco el martes.

En 2002 se confirmó la relevancia de los vestigios hallados por el guarda forestal Koldo Díez de Mena y en 2008 arrancaron las campañas de excavación “hasta 2013 en colaboración con el Ayuntamiento de Zalla”, repasó la diputada de Sostenibilidad y Medio Natural, Elena Unzueta. Este año “se han autorizado trabajos” para reconstruir con base científica “un tramo de muralla de doce metros”, apuntó el alcalde. La estructura cuenta con una longitud de 153 metros y se cree que fue erigida con piedras de una cantera de la zona. Solo se podía atravesar para acceder al poblado por una puerta en la parte este, que al parecer se remodeló en un momento posterior con fines defensivos.

Para la diputada, la intervención en la muralla “nos ayudará a tener una visión integral” sobre el modo de vida del aproximadamente medio centenar de personas que habitaron el enclave entre el siglo IV antes de Cristo hasta el siglo I después de Cristo, “sin que pasara por aquí la romanización, matizó el arqueólogo del Departamento de Cultura y Política Lingüística del Gobierno vasco Armando Llamosas.

El trámite al que se dará curso en consejo de gobierno en Lakua “supone el inicio del camino para seguir investigando y nos impone el reto de cuidarlo y mantenerlo, señaló el consejero Bingen Zupiria durante la visita al castro en la que también participaron el viceconsejero de Cultura, Andoni Iturbe; la directora general de Cultura de la Diputación, Begoña de Ibarra, y las concejalas de Cultura y Turismo de Zalla, Rosana Martínez y Rakel Unzueta.