leioa - Las obras para conectar Artaza y la parte alta de San Bartolomé de una forma mecánica, mediante pasarela y ascensor vertical, prosiguen su ritmo y acaban de atravesar una fase de notable impacto visual con la colocación de la pasarela, de 50 metros de longitud en total. Así que los trabajos para mejorar la accesibilidad entre estos dos puntos de Leioa avanzan para poder estar terminados, presumiblemente, en un par de meses.

La estructura por la que pasarán los peatones tuvo que ser transportada en dos piezas de 25 metros cada una e instalada con una grúa de gran tonelaje. Además, su traslado motivó cortes de tráfico puntuales en el entorno. La primera pieza de la pasarela en ponerse fue la que parte desde Basañese Kalea y alcanza la pila central, para lo cual la grúa se situó en esa calle. A continuación, se colocó el tramo que conecta la pila central con el ascensor, y, entonces, la grúa estuvo en Artatza Kalea. Así transcurren estas labores que tienen un coste de más de 655.000 euros y que servirán para salvar pendientes del 11,56% y del 7,50% -valores que se encuentran por encima del 6% establecido como máximo para los itinerarios peatonales en la normativa vigente en relación a la accesibilidad en los espacios públicos-. Eso sí, el camino, posteriormente va reduciéndose hasta llegar a ser prácticamente plano en su término. De hecho, es a mitad de su recorrido cuando, en la actualidad, existen unas escaleras en zig-zag que llegan a Artatza Kalea. Y la ubicación de una parada de Bizkaibus a esa altura de la calle hace que estas escaleras sean muy frecuentadas por los vecinos de San Bartolomé. Sin embargo, algunos de los residentes en esta parte baja del barrio están en contra de las características de este proyecto porque consideran que "invade su intimidad". Los de la zona alta, mientras, celebran la construcción del ascensor.