GETXO. En las aulas de los colegios ya no solo se aprenden Matemáticas, Lengua o Historia, también se desarrollan programas para educar a niños y jóvenes sobre los peligros de las drogas, del juego on line o del uso desmesurado de las nuevas tecnologías, e incluso, para conocer más acerca de los sentimientos y los valores. El pasado curso, 2018-19, sin ir más lejos, 6.311 estudiantes de Getxo participaron en este tipo de asignaturas.

Como explican desde el Área de Servicios Sociales del Ayuntamiento getxotarra, responsable de estos talleres de prevención de adicciones, estos “responden a una cada vez mayor demanda de técnicos que suplanten la tarea del profesorado en temas específicos, que ha supuesto un importante cambio cualitativo en la metodología tradicional de intervención comunitaria ya que anteriormente se centraba más en la formación/capacitación del profesorado para que este fuera quien trasladase dichos conocimientos como mejor conocedor de la realidad educativa”. Es por ello que desde hace más de cinco años, el Consistorio de Getxo pone en marcha estas clases de prevención en adicciones, principalmente, pero que también abordan otras cuestiones. De hecho, los objetivos de este plan son favorecer la adquisición de capacidades personales positivas (autorregulación emocional, valores?), propiciar la prevención y reducción de riesgos ante el uso inadecuado de sustancias, y promover un uso responsable de nuevas tecnologías.

En total 2.583 alumnos de Educación Primaria y 1.093 de Educación Infantil, pertenecientes a 180 aulas de diferentes centros del municipio, trabajaron el pasado curso en actividades sobre emociones, uso adecuado de redes sociales, valores... Por otra parte, 1.730 estudiantes de Educación Secundaria, y 905 de Bachiller, de 107 clases de distintos centros, asistieron a talleres sobre prevención de drogodependencias, sobre los riesgos del alcohol y las drogas, las apuestas, juego on line, uso adecuado de redes sociales, etc. Asimismo, este programa municipal en colegios, respondiendo a las demandas realizadas por los propios centros, duplicó el número de horas dedicadas a los talleres de información y prevención de drogodependencias, en todos los cursos de Secundaria, Bachiller y ciclos formativos. En este tipo de talleres se implicaron 1.016 jóvenes de 49 aulas.

En concreto, lo que buscan estas asesorías sobre drogas es: informar sobre los efectos y riesgos desde una perspectiva objetiva y no moralizante; reducir los riesgos derivados de consumos abusivos; hacer reflexionar sobre los propios consumos, sus formas, sus efectos y sus riesgos; intentar descodificar los mitos y estereotipos; y resolver dudas e inquietudes respecto a las drogas.

Nuevas ‘lecciones’

Entre las novedades de esta iniciativa, que ha tenido lugar durante el curso recién finalizado, se encuentran los programas sobre diferentes características de educación emocional para Primaria, como los denominados Ni neu, zu zeu y Sentiktuz. En el primero, participaron 466 estudiantes de tercero mediante sesiones de cuentacuentos, donde trataron la asertividad como recurso en la prevención de adicciones, y resaltaron la importancia de decidir individualmente, entendiendo que cada persona es diferente. Además, 392 escolares de quinto se centraron en las relaciones físicas y digitales sanas a través del proyecto Sentiktuz.