El Ayuntamiento ha dado un paso más en el recuerdo del bombardeo fascista contra la villa en 1937. Y es que, con el apoyo de la administración local, Gerediaga Elkartea y Durango 1936 Kultur Elkartea se inició el pasado otoño un estudio con el objetivo de profundizar en la identificación de las víctimas supuestamente enterradas en las fosas comunes del cementerio y localizar a sus familiares.

El punto de partida de la investigación ha sido un listado con referencias de 84 personas. Se considera que se trata de un listado recogido en las hojas retiradas del libro de registro del cementerio de Durango y que aparecen enterradas en fosas comunes, no siempre con nombres y apellidos. Precisamente, una de las dificultades de la investigación ha sido que no todos los enterrados tenían nombre y apellidos. En algunos casos solamente se han encontrado como referencia el número de placa y en otros, el oficio de la persona. En el caso de las 51 personas de la lista, los testimonios han tenido mucha importancia. En este sentido, la documentación encontrada en el registro civil, las referencias a los libros parroquiales y las nóminas de los batallones de gudaris han ayudado.

El trabajo de campo ha corrido a cargo del durangarra Jimmi Jiménez. De la lista de 84 personas objeto de investigación se han obtenido 51 nombres y apellidos de personas, algunas de ellas mal corregidas. Además, se ha podido confirmar que dos de ellos fueron exhumados en los años 40. Además, se ha logrado localizar a 25 familias de estas víctimas.

De las 51 víctimas identificadas, 34 son hombres y 17 mujeres. En cuanto a la procedencia, 25 personas pertenecientes al Duranguesado y otras 26 externas, mientras que las víctimas civiles son 31 y los gudaris 20. "La investigación seguirá abierta porque trabajos de esta naturaleza suelen tardar en dar sus frutos. Además, la investigación iniciada también ha abierto líneas para un trabajo más profundo", explicaron las dos entidades inmersas en la investigación. Tras esta experiencia, el Ayuntamiento tiene previsto crear un grupo de trabajo más permanente para trabajar más a fondo las diferentes aristas que puede tener la memoria histórica de la localidad, más allá de los actos conmemorativos que se celebran anualmente. "Este año se cumple el 85 aniversario del bombardeo y estamos trabajando en un amplio programa de actos conmemorativos".