Coincidiendo con la llegada de la Navidad, el Ayuntamiento de Abadiño realizó en la jornada de ayer jueves un llamamiento a la ciudadanía que se evite el uso de pirotecnia estas fiestas. Y es que, aunque se los considera sinónimos de alegría, los fuegos artificiales son nocivos tanto para el medio ambiente, como para la salud de animales y personas con hipersensibilidad sensorial. En este sentido, se pueden producir lesiones físicas y daños en propiedades por su uso inadecuado. Desde la administración local recordaron que los efectos de la pirotecnia en los animales son diversos y de diferente intensidad. “Los perros suelen sentir temor y al huir pueden ser víctimas de accidentes o perderse. Las aves reaccionan frente a los estruendos con taquicardias que pueden provocarles la muerte; los gatos suelen correr detrás de los explosivos por simple curiosidad pudiendo ingerirlos, perder la vista o lesionarse en caso de explotar. Del mismo modo, las personas con trastorno del espectro autista, con hipersensibilidad auditiva, bebés y personas mayores son quienes más sufren el impacto de la pirotecnia, ya que suelen no comprender la situación, lo que les genera ansiedad y angustia. Por todo ello, apelamos a la responsabilidad ciudadana para que se evite el uso de material pirotécnico de alto nivel sonoro”, solicitaron desde el Consistorio abadiñarra.

En la actualidad, los fuegos artificiales y ruidosos petardos suelen convertirse en los grandes protagonistas para dar la bienvenida al año nuevo en Nochevieja. “La verdad que cada vez son más las personas a título individual y también asociaciones que nos piden ser responsables en este sentido, para garantizar el bienestar de animales de compañía y personas con necesidades especiales”, aseguró Carmen Marco, concejala de Eventos y Ocio.