Tras su suspensión el año pasado por la pandemia, la Euskal Denda abre sus puertas este sábado en la plaza del mercado de Durango. Organizada por la asociación nacional de artesanos Arbaso, y fiel a su cita anual, el escaparate más importante de artesanía de Euskal Herria celebra sus bodas de plata con las puertas abiertas hasta el próximo miércoles.

Serán un total de 52 los artesanos provenientes de Araba, Bizkaia, Gipuzkoa, Nafarroa Behera y Nafarroa los que participen en esta cita. Además, la feria se verá ampliamente renovada en lo que a las firmas se refiere y es que 18 de los profesionales presentes serán nuevos. Esto supone que el 36% de los artesanos son inéditos en esta plaza, aportando frescura y renovación al evento. Por territorios, una vez más Bizkaia se pone a la cabeza con el mayor número de representantes con 25, Gipuzkoa estará presente con 15 firmas, muchas de ellas pioneras; procedentes de Araba llegarán cinco y desde Nafarroa viajarán seis. Desde Nafarroa Behera participará un artesano.

Como viene siendo habitual, Durangaldea contará con un lugar protagonista dentro de la Euskal Denda y es que serán cinco los artesanos de la comarca los que asistirán. En este sentido, no faltará un año más a su cita el joyero local Eneko Unzalu, que tiene en esta plaza una cita ineludible.

El berriztarra Felix Larrañaga, dedicado a la talla de madera, volverá a reencontrarse con su público, de quien recibió el apoyo en 2018, cuando le otorgaron el premio al mejor estand. Tampoco se perderá esta cita la joven elorriarra de Gorakat, que asiste por cuarto año, y está especializada en bolsos, mochilas y carteras hechas a mano. Fijos también a la plaza durangarra son el taller de restauración Restaurarte, ganador del mejor estand en 2010, e Iñaki Unanue, quien por primera estará presente en la Euskal Denda. "No podemos olvidar que las ferias son nuestros principales escaparates. Es cierto, que comercializamos en Internet, pero el cara a cara y el compartir con la clientela es nuestro valor fundamental y esto solo lo tenemos en las ferias en general y en la Euskal Denda en particular", reflexionaron desde la organización.

Un año más la Euskal Denda pretende difundir y profundizar en el fomento y la comercialización de la artesanía, con el sello de haber sido realizada en Euskal Herria. "Esta es una ocasión sin igual para que el público conozca el trabajo en vivo del artesano, cuestión más que necesaria para descubrir a estos profesionales. La artesanía vasca tiene calidad suficiente para traspasar fronteras y en esa dirección se está trabajando en los últimos tiempos", puntualizaron ambiciosos desde Arbaso.