Hace años que los spas para bebés son un negocio al alza en Europa. Estos locales cuyo público oscila entre los 0 y los 12 meses, son centros de estimulación acuática temprana en los que los bebés pueden desarrollar sus sentidos y reflejos nada más nacer y sus padres tienen la oportunidad de aprender un poco más acerca de cuál es la forma ideal de trabajar con sus hijos las habilidades psicomotrices.

Los masajes anticólicos o los de primeros vínculos con aceites naturales son algunas de las propuestas más demandadas en estos atípicos balnearios urbanos para recién nacidos. Son actividades recomendadas para cualquier bebé, aunque en estos centros también ofrecen hidroterapia para niños con necesidades especiales. Entre sus beneficios, estos ejercicios favorecen el tránsito intestinal y la calidad del sueño, además de aumentar el apetito. Al igual que en los spas al uso para mayores, también aquí se pueden encontrar servicios de fisioterapia o actividades como pilates.

La empresa burgalesa Splash Baby Spa fue pionera en el Estado en abrir uno de estos centros y será la encargada de abrir una de sus franquicias en Bilbao el próximo mes de octubre. El spa, aún en obras, estará situado en la calle de José de Olabarria, y su futura gerente, Elisa Goicoechea, fisioterapeuta, cuenta que conoció el negocio a través de anuncios en redes sociales y rápidamente se planteó con su pareja abrir una de estos locales en Bizkaia, por lo que decidieron ir a visitar el spa abierto en Burgos. Ella misma tiene dos hijas con las que ha podido probar la experiencia de splash. Asegura que las actividades son tan valiosas para los niños como para los padres, que “aprenden mucho sobre los movimientos y masajes que hacer con el bebé y desarrollan los reflejos para su mejor cuidado”. Entre los beneficios que ofrece el agua está el de fortalecer el vínculo entre padres e hijos.

Las sesiones con técnicas de estimulación multisensorial rondan los 50 minutos de duración y tienen un coste aproximado de 40 euros. La primera sesión, según cuenta Elisa, se ofrecerá de prueba para que los primerizos puedan ser testigos de los beneficios de estas actividades antes de pagar unos bonos que ofrecen para disfrutar más tiempo de estas actividades y que los niños comiencen lo antes posibles con terapias duraderas y constantes. En el futuro centro de Bilbao dispondrán de tres bañeras individuales para los más pequeños y algunos jacuzzis para que los niños un poco más mayores puedan disfrutar en grupo de las bañeras con chorros, burbujas y cambios de color en el agua.

Con flotador especial En estas bañeras llamadas neonatales, los niños llevan un flotador especial colocado en el cuello que favorece la completa movilidad del resto del cuerpo para que puedan realizar correctamente los ejercicios y que les permite flotar verticalmente sin peligro de vuelco. Elisa aclara que “las actividades del centro son para cualquier bebé, todo el que quiera puede acercarse con sus peques y disfrutar de la experiencia, beneficiosa para padres e hijos”.

Los responsables de este nuevo centro destacan el cuidado en los cambios del agua y el tratamiento de todos los materiales. Los niveles de ph están muy vigilados y todos los productos utilizados en su mantenimiento son neutros para reducir al mínimo el riesgo de infecciones o contagios sobre todo en las bañeras en las que estarán los bebés que aún no han recibido sus primeras vacunas. Toda esta hidroterapia infantil está adaptada en todos los sentidos a la delicada piel de los más pequeños. El agua se cambia con cada bebé y se cuida mucho la higiene alrededor de estos niños que aún no disponen de las defensas necesarias contra posibles contagios.

La flotabilidad y la apnea debajo del agua son algunos de los reflejos a desarrollar, para no perder la actividad que instintivamente ya realizan en el líquido amniótico durante el embarazo. La respiración es un reflejo innato a reforzar, favoreciendo las habilidades vitales y de supervivencia bajo el agua, con estos ejercicios los bebés fortalecen los músculos y su estructura ósea.

Con el lema Más que agua para tu bebé, aseguran que este método de nuevas prácticas de aprendizaje y estimulación, además de favorecer el desarrollo motor, también favorece al cognitivo, emocional y social del bebé, ayudándole a superar el posible trauma que supone el parto. Además, todas las actividades presentadas aumentan la seguridad y autoconfianza del bebé, incrementando su creatividad gracias a los juegos acuáticos y liberándoles del estrés del hogar.

Además del centro de Bilbao, las últimas aperturas fueron en Ibiza y las Palmas de Gran Canaria, que se sumaron a los centros de Burgos, Madrid y Barcelona. Los spas para bebés de Splash también están presentes en América, con un local en Santiago de Chile.