Las obras de construcción de la red de colectores enmarcadas dentro del ambicioso y necesario proyecto de saneamiento del Alto Nervión han arrancado en terrenos del término municipal de Orozko. En esta localidad hay que realizar dos trazados diferentes: uno para el río Nervión y otro para su afluente, el Altube. En ambos casos, las conducciones llevarán los vertidos residuales urbanos e industriales generadas en el municipio hasta la planta depuradora que se levantará en Basaurbe, en terrenos de Laudio.

Los trabajos de creación del entramado de colectores en Orozko se encuentran divididos en 6 tramos. En concreto, la maquinaria pesada está ya actuando en la zona comprendida entre Hegoalde y el puente del barrio de Zubiaur, y también en el ámbito localizado entre Torlanda y las instalaciones de la empresa Artiach. El plan de actuación mantiene otras fases en el trazado diseñado para las conducciones: desde el barrio de La Cadena hasta Burrullaga, desde la zona industrial hasta Atxondo, a lo largo del polígono industrial de Torrezar, y de Kantarrana hasta Presatxu.

Se trata de la parte vizcaina de un ambicioso proyecto que contempla la instalación de una red de saneamiento de aguas residuales de 20,5 kilómetros de longitud que recogerá los vertidos de las poblaciones alavesas de Saratxo, Amurrio, Murga, Luiaondo, Olabezar y Laudio, así como las referidas de Orozko. La inversión asciende a 40 millones de euros y el proyecto contempla, además, la construcción de cuatro tanques de tormenta y dos estaciones de bombeo asociadas, en Laudio y en el barrio de Areta.

Dos depuradoras

En lo que se refiere a las dos Estaciones de Tratamiento de Aguas Residuales previstas en el plan de saneamiento, la ubicada en los terrenos de Basaurbe, en el término municipal de Laudio, tiene un presupuesto estimado de 15 millones de euros y será la que depurará también las aguas de la cercana población de Orozko. La segunda estará en Markijana (Amurrio) y costará en torno a 18 millones de euros porque es donde además llegarán todos los fangos. Ambas depuradoras estarán dimensionadas para una población de 37.000 habitantes, el doble de la que reside en el ámbito para el que prestarán servicio, y la razón es que también van a estar preparadas para tratar los vertidos industriales. Además, las plantas de tratamiento van a ir dotadas con el sistema más puntero de tal forma que contarán con sistemas efectivos para la eliminación de olores y tratamiento de gases.

En cuanto a los plazos, en una intervención abierta al público realizada hace algo más de un año en Laudio, el entonces director de URA avanzó que en 2023 todas las instalaciones integradas en el plan de saneamiento del Alto Nervión, es decir, la red de colectores y las dos depuradoras de aguas residuales, debían estar entregadas y empezando su puesta en marcha, con el objetivo de que, a finales de ese año, el agua que discurra por el río vaya ya completamente limpia.