La Autoridad Portuaria de Bilbao (APB) inició la colocación en el fondo del canal de Deusto de las piezas del muro que conformarán kilómetro y medio de muelles nuevos en esta orilla de la isla de Zorrotzaurre. Un parapeto que permitirá ensanchar con rellenos los terrenos de la antigua península, comiéndole a la lámina del agua del canal en dos tramos diferentes más de 52.000 metros cuadradose. Sobre la extensión ganada se construirá una docena de bloques de viviendas rodeados de parques y paseos marítimos.

Una grúa de gran potencia es la encargada efectuar la maniobra de posicionamiento con mucha delicadeza y eso a pesar de que cada pieza o módulo que traslada pesa nada menos que treinta toneladas.

Con unas robustas cinchas de color naranja, ayer por la mañana se rodeó el primer módulo en tierra para luego ser elevado por la grúa que, tras girar unos 180 grados, lo depositó en el fondo del canal. Cada una de estas piezas ha sido construida durante los dos últimos meses en los muelles que antaño albergaban los productos de Cadenas Vicinay y justo en línea con el lugar que ocuparán en el canal. Los módulos son únicos, de hecho cada uno está numerado, y lo conforman dos elementos, una pieza prefabricada en Sevilla y una base hueca habilitada previamente, la cual está rellenada con hormigón armado.

Piezas de diferente altura

Tras fraguar todo el cemento se han conformado piezas en forma de L que cuentan con dos contrafuertes cada una y unas dimensiones que van de los 6,40 a los 8,50 metros de altura por dos metros de ancho. La diferente envergadura de cada elemento se debe a que la profundidad del lecho donde son depositadas es variable, mientras que por arriba todas tendrán que quedar a ras para conformar un muelle continuado.

Previamente al meticuloso trabajo del gruista -colocar el primer módulo requirió una hora-, varios buzos fueron los encargados de extender una buena capa de grava en el fondo del canal donde se depositan los paneles. Un material que conforma una especie de pedestal submarino que permite nivelar de forma adecuada cada módulo a la altura requerida. Apenas se notará la diferencia de las partes que conforman el muro más que por una estrecha junta. La estanqueidad debe ser casi total para evitar problemas de humedades.

Estos primeros trabajos comenzaron en el tramo más cercano al puente de Gehry para el cual ya se han generado 370 módulos que suman aproximadamente 750 metros de longitud. Una cantidad similar de piezas son habilitadas en el otro extremo de la isla, en la punta norte, muy cerca de donde se tendió a primeros de año el segundo puente de Zorrotzaurre y que permitirá un acceso directo a San Ignacio. Con el asentamiento de las piezas en el fondo, que se prolongará todo este año, restará rellenar el hueco que quedará entre el muro y la actual orilla. Así se conformará la nueva superficie terrestre ganada al canal de Deusto.

Fórmula inédita. La construcción del muro y de los rellenos posteriores se ejecutan en una operación financiera y administrativa nunca antes realizada. Avalada por seis instituciones, incluido el Gobierno del Estado, las empresas que ejecutan los rellenos cobrarán su trabajo no con dinero, sino con derechos urbanísticos de construcción de varios de los bloques residenciales que el plan de Zorrotzaurre prevé en el ensanchamiento de la isla.