"De jueves a sábado era insoportable estar en casa"
El Ayuntamiento decreta el cierre cautelar de Pacha tras recibir numerosas denuncias vecinales por ruido
Bilbao. "De jueves a sábado era insoportable estar aquí", admite con amargura una vecina. "Algunos días me despertaba a las cuatro de la mañana por el ruido y la música alta". Ahora dormirá más tranquila. El Ayuntamiento de Bilbao decretó el viernes el cierre cautelar del local Pacha Lounge Bilbao, debido al exceso de ruido y a las numerosas denuncias y quejas por parte de los vecinos del establecimiento de la calle de Luis Briñas.
Las últimas pruebas realizadas estimaban que el ruido era casi el doble del valor máximo permitido, situado entre 25 y 30 decibelios, según datos del área de Urbanismo y Medio Ambiente. Los vecinos aseguran que el ruido y las vibraciones les impedían conciliar el sueño, a lo que hay que añadir el botellón que numerosos jóvenes realizaban en el exterior del local y que aumentaba las molestias.
"En casa oímos hasta cómo arrastran las sillas en el local y notamos vibrar el suelo", asegura una de las vecinas. Pero no hacía falta esperar hasta altas horas de la madrugada para percibir "jaleo" en esta calle del centro bilbaino. "A partir de las 22.30 ya se hacía insoportable, y eso que nosotros no les tenemos exactamente debajo", comenta otro vecino del inmueble. "Estar escuchando todo ese alboroto y ruidos hasta las seis de la mañana, cuando más o menos la gente se marcha, es horrible", lamenta.
Otro de los vecinos admite que cada vez que llamaban a la Policía Municipal, "bajaban un poco la música y no se escuchaba tanto ruido. De esa manera no daban positivo", aunque al rato "la volvían a subir y estábamos otra vez en la misma situación. Era insostenible", recuerda. "Les pusieron un aparato para que realizara mediciones de ruido, pero tampoco sirvió de nada", admite.
Sin embargo, los vecinos declaran que no les molesta la discoteca como local, sino que es "el ruido que genera y el alboroto que se forma en la calle" lo que se les genera el rechazo. "Este es un edificio antiguo que no admite la insonorización que exige una discoteca, y eso ya lo sabían desde el principio, antes de que se decidieran a abrir", afirman los vecinos, que no han cesado de quejarse y denunciar el exceso de ruido desde que el local se inaugurase el pasado mes de abril.
Pero tras la última medición de ruido que tuvo lugar el jueves por la noche debido a las nuevas quejas de los vecinos del local, responsables municipales decidieron cerrar cautelarmente Pacha Lounge Bilbao, dado que prácticamente el ruido generado duplicaba el permitido legalmente, con un resultado de entre 45 y 57 decibelios. Puesto que tras recibir la notificación el local cuenta con 24 horas para acatarla, el viernes por la noche Pacha volvió a abrir sus puertas, y los vecinos mostraron de nuevo su enfado por exceso de ruido. "Estaba en el salón de casa y notaba cómo vibraban hasta las sillas. Me han despertado varias veces esta noche -por ayer- y así no se puede descansar", protesta una vecina, una situación que puede deberse a la instalación de "una pista de baile vibratoria" con la que cuenta el establecimiento.
Medida cautelar Con la noticia del cierre cautelar del establecimiento, los vecinos se muestran satisfechos. Pacha ya ha colocado un cartel en sus puertas informando que el recinto permanecerá "cerrado unos días por problemas técnicos".
Desde el Ayuntamiento de Bilbao recuerdan que el cierre decretado es solo "una medida cautelar". "Son problemas técnicos, ya que tienen que poner a punto el aparato que mide el sonido", afirman fuentes municipales. Una vez que el establecimiento solucione el problema y un técnico certifique que cumple con la normativa vigente, Pacha podrá volver a abrir sus puertas.