Ganar sí o sí. Es así de sencillo. No queda otra y el Athletic asume el reto. El colectivo rojiblanco se ha conjurado para mantener vivo el objetivo de alcanzar la séptima plaza que otorga el último billete para competir en Europa la próxima jornada y para ello debe superar esta noche en San Mamés al Atlético de Madrid, un hueso duro de roer y sobre todo cuando también se juega mantener su sitio en la zona Champions. La exigencia, por tanto, es brutal para el conjunto de Marcelino, que no ha perdido en ninguno de sus tres compromisos anteriores (dos de liga y uno de Supercopa) frente al cuadro colchonero desde que ejercer como técnico rojiblanco, una estadística que retrata que este Athletic tiene cogida la media en los últimos tiempos al equipo madrileño, que se presenta en Bilbao con las importantes bajas de Savic, sancionado, y Joao Félix, lesionado.El Athletic, con todo, solo se observa a sí mismo. Marcelino lo tiene claro. Reclama al Athletic de las mejores noches en La Catedral, ya que todo lo que no sea vencer supondría cerrar el curso y dejarse prácticamente llevar en las cuatro jornadas que restarían hasta el epílogo de la liga. El asturiano no dio pistas de su plan, en el que no estarán por razones mayores Oihan Sancet, víctima de unas molestias de pubis que le traen de cabeza y que podrían obligarle a pasar por el quirófano, y Asier Villalibre, que no ha llegado a tiempo de recuperarse de su dolencia muscular. El que sí retorna a la convocatoria es Iñigo Lekue, que un mes atrás sufrió una lesión muscular en el recto femoral del muslo derecho. Así las cosas, Marcelino podría retocar el once que compareció de inicio en Cádiz hace diez días, con las novedades de Yuri Berchiche y Alex Berenguer en lugar de Mikel Balenziaga y Nico Williams, sin descartar la presencia de Unai Vencedor en la medular.