El autor del botellazo a Armando pide perdón
El aficionado del Betis asegura durante el juicio que no quiso herir al guardameta del Athletic
sevilla. El hincha del Real Betis juzgado por lanzar una botella contra el que fuera portero del Athletic Armando Ribeiro aseguró ayer ante el juez que no apuntó y que no tuvo intención de lesionarle. Tras el juicio, le pidió perdón, que el agredido aceptó. El juzgado penal número 1 de Sevilla dejó visto para sentencia el juicio contra el acusado Carmelo P.R., de 42 años, para quien el fiscal ha pedido dos años de prisión por un delito de lesiones y una multa de 3.600 euros por desórdenes públicos, pena que el club deportivo, personado como acusación particular, situó en tres años de prisión por las lesiones y cuatro meses por desórdenes públicos.
El abogado defensor, Álvaro Pimentel, admitió una condena de un año de prisión por el delito de lesiones, y una posible multa de 450 euros por el delito de desórdenes públicos, cuya existencia, sin embargo negó, a la vez que solicitó las atenuantes de dilaciones indebidas y reparación parcial del daño. El letrado rechazó el delito de desórdenes en base a la declaración de un guardia civil que fue el primero que retuvo al acusado y que no apreció alteración del orden público.
El juicio se celebró cuatro años y medio después de los hechos, que ocurrieron el 15 de marzo de 2008, cuando el portero del Athletic recibió en la cara el impacto de una botella de agua de medio litro llena lanzada desde la grada por el hincha, que a continuación fue retenido por los propios espectadores. Pimentel aseguró que, al término de la vista, Carmelo P. R. se acercó a Armado para pedirle disculpas, que este aceptó. Por su parte, el actual integrante de la dirección deportiva de los de Ibaigane, que viajó desde Bilbao a Sevilla para declarar como testigo, dijo que recuerda "el dolor tremendo" que sufrió tras el impacto y lo desagradable de los meses de recuperación, así como la angustia de sus hijos.