Podemos expresó ayer lunes su aspiración a reformar el Tribunal de Cuentas, que actualmente tiene siete miembros que, según su parecer, “los ha puesto el PP y son abiertamente del PP”, al ser un órgano que ha venido “haciendo política” y porque hay que evitar que el órgano fiscalizador sea “un tribunal de ajuste de cuentas”. La formación morada quiere abordar esta cuestión, que llevará al Congreso en el próximo periodo de sesiones, cuanto antes con el PSOE.

Así se expresó el responsable de Educación de la Ejecutiva de Podemos y secretario de la Mesa del Congreso, Javier Sánchez Serna, quien ilustró su posición con un ejemplo: así, contrapuso la imposición de fianzas por las sanciones de 5,4 millones de euros a líderes del procés y la absolución de la exalcaldesa de Madrid Ana Botella de las multas por vender viviendas a fondos buitre. “Tenemos que caminar hacia su despolitización y es la reforma que vamos a presentar y que queremos tratar con el socio”, aseveró.

En una entrevista a Europa Press, Sánchez Serna consideró además que seguir tendiendo la mano al PP para intentar renovar el CGPJ es una “pantomima”, pues “no sirve de nada” a tenor de la actitud de los populares. En consecuencia, llama a explorar alternativas para superar su bloqueo y sondear fórmulas, por ejemplo, que permitan el cese de sus vocales cuando su mandato haya caducado.

En declaraciones a Europa Press, insistió en que la renovación de los órganos constitucionales, en especial el órgano de gobierno de los jueces, tiene que ser una prioridad el próximo curso político. “Hay que hacer algo ya”, zanjó.