BILBAO - El PSOE confía en que ERC dé por bueno el resultado de la negociación de forma inminente y permita desbloquear la investidura de Pedro Sánchez esta misma semana con un pleno que podría arrancar el jueves y finalizar con una segunda votación el próximo domingo día 5, después de que la Abogacía del Estado se haya posicionado de forma favorable a que Oriol Junqueras salga en libertad para formalizar los trámites que le permitan ejercer como eurodiputado. Sin embargo, hay un punto que no gusta a los republicanos, y es que la inmunidad de su líder quede supeditada al pronunciamiento que haga el viernes la Junta Electoral Central (JEC), que podría señalar la incompatibilidad de su condena con su condición de parlamentario electo tras el recurso que presentaron al respecto PP y C's.

Esquerra abonó ayer el terreno a la reelección del presidente en funciones agradeciendo el gesto en todo lo que haya podido contribuir el Gobierno español pero antes de dar por cerrado el acuerdo con los socialistas, aguardan a que lo certifique pasado mañana el Consell Nacional de la fuerza republicana (17.00 horas) -coincidiendo con la hipotética primera sesión de investidura-, que a priori se significaría a favor de que ERC permita a Sánchez ser presidente en segunda votación en plena cabalgata de Reyes. "Hemos llegado al final de las negociaciones y es el momento de poner en manos del Consell la decisión sobre si la propuesta que tenemos es suficiente para abstenernos o no a la investidura de Sánchez", consideró la portavoz de ERC, Marta Vilalta, quien valoró haber arrancado del PSOE la mesa entre gobiernos para solucionar el conflicto político. "Somos escépticos y no somos ingenuos. Nos cuesta creer con este PSOE pero creemos que es una oportunidad para el independentismo que hay que aprovechar", se sinceró, al tiempo que pedía la libertad de Junqueras y avisando de que "llegaremos hasta el final diga lo que diga la JEC o el Supremo" al respecto de su caso.

"No constando la expresa declaración de la incompatibilidad y de la anulación del mandato, el señor Junqueras sigue, hasta que no se produzca dicha declaración por la JEC, ostentando las inmunidades previstas", rezaba el escrito de la Abogacía, de 16 páginas y firmado por la letrada Rosa María Seoane, reseñando que a la luz del fallo del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (TJUE), Junqueras goza de inmunidad parlamentaria desde que fue proclamado eurodiputado el 13 de junio, por lo que debió salir de prisión provisional para tomar posesión de su escaño. Pero el informe recuerda que la Junta Electoral "es la competente para todas las cuestiones relacionadas con la proclamación de candidatos a las elecciones europeas". ERC cree que la Abogacía contradice la sentencia europea y tampoco ve con buenos ojos que en la página 8 se recuerde que la posible "declaración de incompatibilidad y anulación del mandato" del dirigente soberanista, ya sea por decisión de la JEC o después por el Supremo, "implicará también la proclamación de otra persona que figuraba como suplente en la candidatura".

En verdad, la doctrina establecida por la resolución del TJUE pone en duda que el órgano electoral español tenga alguna capacidad de decisión sobre el estatus de Junqueras como eurodiputado. Según el fallo europeo, esta condición se adquiere en cuanto se proclaman los resultados electorales y desde ese momento los miembros del Parlamento Europeo gozan de inmunidad, blindaje que, en principio, solo puede levantar la Eurocámara. Por su parte, el Supremo no se pronunciaría hasta después de las fiestas navideñas sobre si se debe dejar o no en libertad al líder de ERC para que pueda ejercer de eurodiputado. Su decisión puede derivar en la tramitación de un suplicatorio para que el Europarlamento levante la inmunidad al republicano, un proceso lento pero frecuente que de media tarda unos seis meses y que podría alargarse bastante más, si bien no hay plazos precisos. Para colmo, el suplicatorio suele acabar con el levantamiento de la inmunidad de los diputados europeos para que sean juzgados por los delitos que se les atribuyen. Lo que supondría volver a la casilla de salida.

Por su parte, JxCat mantiene su "no" a Sánchez tras escuchar el programa de PSOE y Unidas Podemos. "No estamos para garantizar una España fuerte y cohesionada. Para Catalunya es más de lo mismo y no presagia nada bueno", zanjó Laura Borràs.