Fundación Sabino AranaEmakume Abertzale Batza (EAB)

Necesidades del guión le impidieron manifestar que el conocimiento que su amatxo tenía de EAB venía desde mucho antes, desde junio de 1923, un año después de la constitución formal de EAB. Unas fotografías dan cuenta de ello. Dada la importancia de dichas fotos, así como de la fecha indicada, hemos querido poner en valor el contexto en que María, así como otras jóvenes gasteiztarras, todas ellas con no más de veinte años de edad, conocieron la iniciativa patriótica femenina y se identificaron con la misma, sin que por el momento, por razones obvias, pudieran constituirse en agrupación local.

La asociación de mujeres patriotas EAB merece un destacado lugar entre las organizaciones sectoriales adheridas a EAJ-PNV ya que brilló con luz propia en tareas educativo-asistenciales (Euzko Gastetxu-Ba-tza, Euzko Ikastola-Batza, comedores, ropero vasco...), así como patrióticas (charlas, mítines y artículos de prensa). Su presencia y actividad no son novedosas en el ámbito nacionalista vasco. Este, con anterioridad a EAB, venía acogiendo con mayor o menor grado de implantación e incidencia numerosas iniciativas desde 1907 (Ropero Vasco, artículos de prensa...).

En su corta pero dilatada historia se diferencian dos períodos concretos: uno primero que va desde el 7 de mayo de 1922, momento de su constitución, hasta septiembre de 1923, fecha en que fue declarada ilegal por el dictador Primo de Rivera; un segundo período, ya en pleno período republicano, que va desde mayo de 1931, momento en que reemprende con brío su marcha, hasta julio de 1937, fecha en la que los sublevados franquistas se hicieron con los últimos espacios geográficos leales al Gobierno de Euzkadi presidido por el lehendakari José Antonio Agirre Lekube. Tal vez podría decirse que existió un tercer período. Nos estamos refiriendo a aquel que, pese a su languidez y excepcionalidad, significó la continuidad de la agrupación jeltzale EAB fuera de Euzkadi, en algunos países de Sudamérica, donde miles de personas que huyeron del franquismo hallaron refugio.

En los prolegómenos de la constitución de EAB se encuentra la visita que, a finales de marzo y primeros de abril de 1922, realizó a Euzkadi el independentista irlandés Ambrose V. Martín O'Daly de la mano de Eli Gallastegi, Gudari. Eli presidía en ese momento Juventud Vasca de Bilbao y era burukide del refundado PNV ("aberrianos"), nacido el 4 de septiembre de 1921, de la escisión que sufrió Comunión Nacionalista Vasca (CNV), a la que Kirikiño denominaba Jelbatza.

Entre otras cuestiones de interés, el ilustre visitante, miembro y líder del Sinn Fein, dio a conocer la existencia y el modo de proceder de las mujeres independentistas irlandesas adscritas a la organización Cumann na mBan (=Consejo de Mujeres Irlandesas) a lo largo de la guerra de independencia de Irlanda que, entre 1919 y 1921, mantuvo el Ejército Republicano Irlandés (IRA) con las fuerzas armadas británicas.

El modelo organizativo y la relevancia sociopolítica de la organización irlandesa no pasaron desapercibidos para el refundado PNV. Sus dirigentes, en especial Gudari, animaron a las mujeres próximas al partido "aberriano" a imitar a las irlandesas, creando para ello una organización femenina vasca a la que denominaron Emakume Aber-tzale Batza (EAB). A fin de facilitar su cometido, Juventud Vasca de Bilbao puso sus locales de la calle Bidebarrieta 14 al servicio de la recién constituida entidad; no en vano la agrupación femenina fue creada como filial de la propia Juventud Vasca.

La reacción no se hizo esperar en las filas de CNV. Un año después de que un grupo de jóvenes disconformes con la todopoderosa Juventud Vasca bilbaína crearan en abril de 1922 la denominada Juventud Nacionalista o Jeltzale Gaztedija y se pusieran a las órdenes de CNV, otro grupo de mujeres, lideradas en cierta medida por la poeta y escritora Tene Mujika, constituyeron, con escaso éxito, otra entidad femenina, la denominada Emakume-Azarri-Bazkuna (EAB). [Azarria: audaz, atrevida]. La coincidencia, premeditada o no, de las siglas, fue motivo de más de una protesta y/o reclamación por parte de la agrupación aberriana.

A diferencia de Bizkaia, en especial Bilbao, y, en menor medida en Gipuzkoa, la implantación del refundado PNV fue nula en Navarra y escasa en Álava. Respecto a Álava cabe decir que tan solo se constituyó la organización municipal de Vitoria-Gasteiz con anterior al 30 de noviembre de 1922. Tampoco poseemos noticias que hagan referencia a la constitución de alguna agrupación de emakumes en territorio alavés en el período anterior a septiembre de 1923. La única noticia que poseemos hace referencia a la entusiasta acogida que un nutrido grupo de jeltzales gasteiztarras, entre las que se encontraban, al menos, cinco mujeres jóvenes, dispensaron al grupo de teatro de Juventud Vasca de Bilbao.

Se trata de las hermanas Josefa Pepita y Concepción Concha Gómez de Balugera Uberetagoiena, y las hermanas María, Soledad y Blanca Oar Larrañaga. Éstas estaban vinculadas, por lazos de amistad, con algunas de las personas "aberrianas" que con anterioridad habían pertenecido a Juventud Vasca de Gasteiz y/o militado en las filas alavesas de CNV hasta su marcha o expulsión. Entre otras, las siguientes: los hermanos Julián y Francisco Agirre Basterra, Lucio García de Andoin Sedano, Isaac Díez Ibáñez y el veterano Manuel Eskoriaza.

La acogida a la que nos hemos referido se llevó a cabo a primeros de junio de 1923. Coincidió con la puesta en escena en Vitoria-Gasteiz del melodrama Pedro Mari. Dicho melodrama, dividido en cuatro actos, había sido escrito por Alfredo Etxabe, en base a una breve novela histórica del mismo título escrita por Arturo Campión en 1895. Contaba con cinco hermosos escenarios pintados expresamente por el reputado pintor y decorador Eloy Garai Makua, natural de Labastida.

El melodrama fue estrenado un año antes, el 19 de marzo de 1922, en Bilbao. Fechas antes, Euzko-Gastedi-Batza (Federación de Juventudes Vascas) mandó imprimir 5.000 ejemplares de la novela de Campión. Su distribución y consiguiente lectura favorecieron la excelente acogida que el púbico dispensó al melodrama de Etxabe. La actitud patriótica de Pedro Mari, el joven protagonista de la novela, no pasó desapercibida para nadie, especialmente para los aberrianos, que veían en él un modelo a imitar. Tal vez por ello, Juventud Vasca de Bilbao repuso el melodrama un año más tarde, los días 1, 7 y 15 de abril de 1923, en el teatro Campos Elíseos de Bilbao.

A la vista del éxito obtenido, el grupo teatral acordó llevar a cabo una gira artística a lo largo de la geografía vasca peninsular entre los días 27 de mayo y 7 de junio. Tras su paso por Eibar, Donostia y Pamplona, la caravana, formada por 4 autobuses y varios coches, llegó procedente de Lizarra-Estella a Vitoria-Gasteiz el viernes 1 de junio por la tarde. Previamente, al objeto de garantizar el éxito de la expedición, jóvenes de ambos sexos pertenecientes al refundado PNV vitoriano llevaron a cabo los trabajos de organización, propaganda y venta de entradas. Asimismo, los "aberrianos" Julián Agirre e Isaac Díez se dirigieron a Joaquín Sarasola, presidente de Juventud Vasca de la ciudad también conocido como Gazteiz'ko Euzko Gaztedija (c/ Cercas Altas 3, 2º, actual c/ Siervas de Jesús), solicitándole la presencia de los dantzaris de Juventud Vasca en el acto de recibimiento, así como demandando la necesaria autorización para visitar el batzoki o sede de Juventud Vasca, dado el caso en que los visitantes mostrasen el deseo de conocerlo. Sarasola accedió a lo solicitado, no sin antes advertir a los "aberrianos" que evitasen, en lo sucesivo, criticar a Gazteiz'ko Euzko Gaztedija. Ésta, a diferencia de la bilbaína, se mantuvo bajo la órbita de CNV.

La caravana propagandística fue recibida por un nutrido grupo de patriotas locales, así como por el grupo de ezpatadantzaris más jóvenes de Juventud Vasca. Todos juntos recorrieron las principales calles de la ciudad, entre bengalas, estallido de cohetes, música de txistu, gritos de alegría y goras. El grupo de teatro se alojó en el Hotel Biarritz.

El melodrama fue representado en el Nuevo Teatro el 2 y 3 de junio, sábado y domingo respectivamente. El éxito de las representaciones fue sonado ya que se vendieron todas las localidades del teatro. Ello se debió, principalmente, al tesón del grupo de jóvenes emakumes gasteiztarras que, con un entusiasmo digno del mayor encomio, despacharon el billetaje a domicilio. Dichas jóvenes, o al menos parte de ellas, entre las que se incluyen las mencionadas más arriba, se fotografiaron el 2 de junio en el parque de El Prado gasteiztarra con parte de las personas que componían la caravana propagandística. En una de dichas fotografías, las jóvenes emakumes gasteiztarras muestran la bandera de Emakume-Abertzale-Batza (EAB) que portaba el grupo de teatro aberriano.

Aprovechando su estancia en la ciudad, el grupo teatral, en compañía de numerosos jóvenes gasteiztarras de ambos sexos, visitaron, entre otros lugares, el santuario de Estibaliz. Su presencia no fue bien vista por el obispo Leopoldo Eijo Garai. Éste ordenó al prior de la comunidad benedictina que no permitiera a los excursionistas hacer allí ninguna fiesta. A pesar de la prohibición, después de rezar el rosario, bailaron un aurresku de honor y se hizo una romería. Tras abandonar la ciudad el día 4, el cuadro dramático se dirigió a Eibar.

Es de reseñar la vinculación que dichas jóvenes tuvieron con el grupo mendigoxale Itxarkundia de Gasteiz. Este grupo, constituido en abril de 1921 en el seno de Juventud Vasca de la ciudad, se distanció de CNV con ocasión de la crisis interna y se alineó con el refundado PNV. La vinculación a la que nos referimos tiene que ver con la confección de la bandera de Itxarkundia por parte de las mencionadas emakumes y su entrega posterior al grupo mendigoxale en un acto que se llevó a cabo en la cumbre del monte Gorbeia el 29 de junio de 1923.

La incipiente y prometedora actividad de aquel puñado de jóvenes emakumes se vio truncada pocas semanas después. El 13 de septiembre el capitán general de Cataluña, Miguel Primo de Rivera, se sublevó contra el Gobierno y, tras dar un golpe de Estado, ilegalizó todos los partidos políticos, también EAB. No por ello, las mencionadas emakumes permanecieron inactivas. Años más tarde, tras la proclamación de la República, tuvieron ocasión de organizarse debidamente y de dar lo mejor de sí en favor de la causa patriótica vasca. l

(Elorrio, 1957)

Diplomado en Magisterio y licenciado en Filología Vasca por la Universidad de Deusto. Jubilado. Socio de la Fundación Sabino Arana y de Eusko Ikaskuntza. Afiliado a EAJ-PNV. Autor de numerosas publicaciones relacionadas con el nacionalismo vasco, así como con San Valentín de Berrio-Otxoa. Con anterioridad, ha colaborado en cinco ocasiones en la presente sección de DEIA.

El modelo organizativo y la relevancia sociopolítica de la organización irlandesa no pasaron desapercibidos para el refundado PNV