Tres son los principales ejes sobre los que se asienta el futuro económico, a pesar de que se preveía “un rebrote de la economía vasca en la primavera pasada” pero que estuvo marcado por “la invasión de Ucrania”. “La fortaleza de los mercados de trabajo, la moderación del precio energético y el descenso de la inflación, aunque esta siga siendo elevada” son las claves. Así lo atestiguó este lunes Juan Pedro Badiola, director territorial norte de CaixaBank, durante el encuentro con el lehendakari, Iñigo Urkullu, con DEIA. Esas tres líneas están haciendo que “no parezca que la economía vaya a adentrarse en una recesión prolongada”, aunque reconoció que “el contexto actual es difícil de valorar”.

La situación económica de estos momentos marcada “por el endurecimiento de las condiciones financieras, viéndose el BCE en la necesidad de aumentar los tipos de interés con el fin de sostener la inflación” provoca que, según el centro de estudios CaixaBank Research, “la estimación del crecimiento del PIB en Euskadi sea mucho menos optimista que la del Gobierno vasco”. Badiola apuntó que desde su entidad se sitúa el crecimiento en un “1%” frente al “2,1%” previsto por el ejecutivo vasco.

“No parece que la economía vaya a adentrarse en una recesión prolongada, el escenario apunta mejor”

Entre los principales retos que tiene de cara al futuro la banca, Badiola puso el acento en “la rentabilidad” ya que “llevamos ofreciendo una rentabilidad por debajo de su coste de capital” desde hace más de cinco años. La “infracapitalización” de este sector provocaría “no poder incrementar sus carteras de crédito y, por tanto, no poder financiar su economía”. El director territorial norte de CaixaBank subrayó que “en el proceso de normalización de tipos, no debemos considerar que se estén dando resultados extraordinarios. Que la rentabilidad de la banca esté por encima del coste de capital es una condición necesaria para tener un sistema bancario potente, lo que es clave para el desarrollo de la economía y para el bienestar de los ciudadanos”.

“Estos son momentos de gran exigencia, pero también momentos de grandes oportunidades”

Y es, precisamente, la población a quien hay que acercarle el trabajo de la banca “y la utilidad de nuestro trabajo” y favorecer los diferentes canales de comunicación para que sea una relación bidireccional. “La relación con los clientes ha cambiado de manera radical, pasando de ser una relación de un solo canal a ser multicanal”, comentó Badiola, quien incidió en que “es fundamental que la entidad reconozca y haga una foto integral del cliente” porque cada uno “tiene una expectativa diferente en función del canal”. 

Poner la mirada en el cliente es uno de los principales focos de CaixaBank ya que se pueden “crear cosas que son intelectualmente fascinantes, pero que tienen poco aplicabilidad”. Es por ello que desde la entidad se marcan un objetivo “más ambicioso: queremos liderar el proceso de transformación del sector con un modelo inclusivo y cercano, basado en la calidad del servicio”, sentenció Badiola antes de apuntar “que son momentos de grandes exigencias pero también momentos de grandes oportunidades”.