Jon Rahm abre la temporada 22-23 del PGA Tour en The CJ Cup, un torneo que disputa por segunda vez, la anterior fue en Las Vegas, y en el que desde hoy están varios de los mejores jugadores del mundo, seis de los diez primeros y quince de los veinte mejores. De hecho, se puede producir un relevo en la cima del ranking si Rory McIlroy, el número 2, defiende con éxito su título del año pasado y Scottie Scheffler, número 1 desde marzo, hace un mal resultado. Esta cita se celebraba en Corea del Sur, pero desde la pandemia se ha asentado en Estados Unidos y esta semana se juega en el Congaree Golf Club en Carolina del Sur, un par 71 largo.

El golfista de Barrika llega tras su triunfo con exhibición en el Open de España que siguió al segundo puesto en el BMW Championship de Wentworth y está en condiciones de sumar en esta cita sin corte su primera buena cantidad de puntos para el circuito estadounidense antes de afrontar la final del DP World Tour en Dubai a mediados de noviembre. Rahm saldrá los dos primeros días con Jordan Spieth y con Keegan Bradley, el ganador de la semana pasada en el Zozo Championship.

Rahm se estrena en el Congaree Golf Club, “pero todo lo que me han dicho de él son maravillas, así que estoy deseando jugarlo”. En su anterior presencia en The CJ Cup fue decimoséptimo y espera dar un buen tono en esta edición, aunque también mostró su deseo de que el torneo pueda volver a Corea “donde nunca he podido jugar por mis compromisos con el circuito europeo, pero es un país que me encantaría conocer”. “Es un gran torneo con una gran participación y espero coger una buena cantidad de puntos ya que no volveré al PGA Tour hasta el Sentry Tournament de Maui”, añadió. – R. Calvo