El Gobierno alemán aplicará una bajada temporal del IVA del gas, que pasará a ser del 7 por ciento en vez del 19 por ciento, con el fin de aliviar el coste soportado por hogares y empresas como consecuencia de la subida de los precios, a la que se sumará desde octubre la nueva tasa fijada para repartir entre los consumidores el encarecimiento del combustible.

El canciller alemán, Olaf Scholz, ha defendido que la bajada temporal del IVA del gas servirá para aliviar el aumento de los costes soportados por los consumidores y ha expresado su confianza en que las empresas trasladarán completamente esta rebaja al público. "La cuestión de la justicia es crucial para la cohesión", ha subrayado.

En este sentido, ha subrayado que el Gobierno federal "no deja a nadie solo en la crisis" y está preparando un tercer paquete de medidas de ayuda que será anunciado en las próximas semanas.

Desde el próximo 1 de octubre, los consumidores alemanes deberán asumir en sus facturas una nueva tasa al gas de 2,419 céntimos de euro por kilovatio hora (KWh) establecida con el fin de repartir entre hogares y empresas el aumento de los costes del combustible, lo que se traducirá en un recargo de unos 480 euros al año por familia.

A este recargo, se sumará otro de 0,059 céntimos por kilovatio hora (kWh) para cubrir los costes de almacenamiento del gas, además de un suplemento por neutralidad de balance de 0,57 céntimos por kWh, según ha anunciado este jueves Trading Hub Europe (THE), el coordinador de área del mercado del gas en Alemania. De este modo, el recargo en la factura del gas para las familias alemanas se espera que supere los 500 euros al año.

Alivio para los consumidores

Según ha explicado el canciller germano, la rebaja de la fiscalidad del gas estará en vigor hasta marzo de 2024 o el tiempo que se aplique la nueva tasa del gas, por lo que el alivio final para los consumidores será superior al recargo que implica el nuevo gravamen.

"Al dar este paso, estamos ofreciendo un alivio a los consumidores de gas significativamente mayor que el coste adicional causado por los recargos", ha defendido el canciller.

En este sentido, la Asociación Federal de Industrias de la Energía y el Agua (BDEW), calcula que la reducción del IVA del gas al 7 por ciento implicaría, en función de los precios del combustible, un ahorro anual de entre 378 y 454 euros para una vivienda unifamiliar con un consumo de 20.000 kWh al año, mientras que una vivienda en un bloque de apartamentos y un consumo de 13.333 kWh al año ahorraría entre 252 euros y 303 euros.