La E-Liga Santander regresa esta temporada con un nuevo elenco de equipos y jugadores que pelearán por los 300000 euros que este año la liga reparte como premio económico. El Athletic, ausente en las primeras ediciones de este campeonato por decisión propia, podría estar de nuevo en peligro de no participar por un motivo conocido en lo que a manera de actuar se refiere: Su filosofía.

Según explicaban hoy en el programa de Onda Vasca de "La movida Deportiva", la intención del conjunto rojiblanco era participar en este campeonato siguiendo la misma forma de actuar que en el fútbol profesional, con jugadores de deportes virtuales vascos incluso manejando el mando de la Play Station detrás de la pantalla. Además de esta circunstancia, el club rojiblanco tenía claro que además de cumplir la filosofía en este apartado todos los jugadores del FIFA23, videojuego oficial de esta competición, debían ser también nacidos o formados en Euskadi. Con esta directriz, al Athletic se ha encontrado con un problema que puede ser determinante para poder debutar en este torneo: la dificultad de competir en esta liga con esas condiciones.

En Euskadi la cantera en lo que se refiere a los deportes virtuales está emergiendo con fuerza hasta el punto de que, el número 13 del ranking estatal en el videojuego es de Basauri y ya defendió la pasada temporada al Amorebieta en el torneo. Actualmente existen además equipos de jóvenes que se dedican de manera semiprofesional al a los videojuegos.

En el mundo de los videojuegos virtuales la diferencia de plantilla es decisiva a la hora de ganar o perder partidos. Cualquier equipo de este torneo puede seleccionar a cualquier jugador del mundo aunque no juegue para el equipo que disputa el partido. Además, existen "jugadores especiales" con unas cualidades extraordinarias, como por ejemplo Ronaldo Nazario o Zidane en la temporada pasada. La confección de la plantilla es por tanto uno de los momentos más determinantes y al no poder hacer una selección mundial el Athletic está en una posición de inferioridad con respecto a cualquier otro equipo aún mayor que en la vida real. Este es el mayor escollo que el Athletic ha de superar para poder formalizar la inscripción en este torneo.