“Sensación de rabia y de tristeza”. La máxima retrata el regusto con el que se quedó el Amorebieta en su visita al Nàstic, donde sufrió su segunda derrota del curso, ambas lejos de Urritxe, en un encuentro en que el conjunto de Haritz Mujika mereció sacar algo positivo del Nou Estadi Costa Daurada. Un solitario gol de Guillermo Fernández, exfutbolista del Athletic, al filo del descanso acabó con las ilusiones de la escuadra azul, que vio cómo un remate de cabeza de Pradera a centro de Juan Rodríguez se estrelló en la cruceta de la meta catalana. El propio técnico del equipo vizcaino así lo manifestó a la conclusión del choque. “Hemos dominado durante muchas fases del partido. En la primera parte hemos estado bien por momentos y cuando mejor estábamos y teníamos el control ha llegado su gol”, un tanto del que Mujika no quiso polemizar, pese a que el delantero bilbaino estaba en aparente posición de fuera de juego cuando conectó el testarazo que superó a Jonmi Magunagoitia, que poco pudo hacer para evitarlo.

Mujika, cariacontecido por el negativo resultado de Tarragona, opina que la idea de su grupo residía en que el partido “nos tenía que dar tiempo para que ellos se pusieran nerviosos y nos les salieran las cosas”, objetivo que se cumplió durante muchos minutos, sobre todo con anterioridad al tanto de Guillermo. “El primer tiempo iba por esos derroteros, pero en una acción en la que han centrado no hemos estado atentos a la marca, no hemos sido contundentes y se nos ha ido el partido”, explicó el preparador de los azules, que se extendió sobre la lectura que realizó del encuentro: “En el segundo tiempo hemos intentado sacar provecho de los centros, de las caídas de nuestros delanteros, y hemos tenido varias ocasiones. No ha podido ser y se nos ha ido el partido en las áreas, por la falta de contundencia en la nuestra y por no materializar las que hemos tenido”.

Es, precisamente, esa falta de pegada en las citas más recientes la que está penalizando al Amorebieta en este tramo inicial de temporada. Transcurridas las primeras cinco jornadas, el conjunto zornotzarra, que solo tiene un punto de colchón respecto a los puestos de descenso, ha firmado seis tantos, los mismos que el líder Alcoyano, pero cuatro de ellos los ha ejecutado en un mismo partido, en su única victoria hasta la fecha, la sellada en Urritxe frente a la SD Logroñés (4-2). Así las cosas, el equipo azul encadena 232 minutos sin ver puerta, ya que su última diana data del minuto 38 del derbi en Tajonar ante Osasuna Promesas, obra de Urko Izeta, mientras que han carecido de pólvora en la visita del Barça Atlètic a Urritxe y en el mencionado partido en Tarragona.

En este sentido, el Amorebieta quiere recuperar sensaciones y el olfato de gol con motivo del compromiso del próximo domingo en Urritxe, desde las 12.00 horas, frente al Numancia, que en la pasada jornada estrenó su casillero de triunfos y de goles y en el que milita el delantero Iker Amorrortu, que fuera jugador azul la campaña anterior.