El PSE va a forzar a la Diputación a asumir en solitario el descuento del 50% en el precio del billete en Bizkaibus. A través de un acuerdo con EH Bildu, ha aprobado una moción en la que pide a la institución foral que mantenga la bonificación el próximo año con independencia de lo que haga el Gobierno español, que hasta ahora asume el 30% de esas rebajas pero no ha aclarado si lo mantendrá en 2023. "Crea unas ayudas y luego las quiere mantener pero siendo otros las que las paguen", ha criticado el apoderado del PNV, Unai Lerma. Los descuentos se mantendrán al menos durante los seis primeros meses del año y posteriormente se analizará si se dan o no las condiciones para mantenerlas.

EH Bildu había presentado para su debate en este pleno de las Juntas Generales una moción en la que se pedía prorrogar el descuento del 50% en Bizkaibus, eso sí, con la condición de que el Gobierno español mantuviera su parte del 30%, tal como se hace actualmente, de forma que la Diputación asumiera el 20% restante. Pero el PSE, que forma parte del equipo de Gobierno foral, ha querido ir más allá de ese planteamiento, instando a la Diputación a prorrogar durante el año 2023 los descuentos del 50% en Bizkaibus, sin hacer referencia a la aportación de Madrid.

"La enmienda nos ha sorprendido gratamente porque va más allá de nuestra propuesta inicial", ha reconocido el apoderado de EH Bildu, Raul Méndez, respecto a un acuerdo que se ha firmado este mismo miércoles por la mañana, minutos antes de que se debatiera en la Cámara. Méndez ha defendido que estos descuentos son "sostenibles" si, por ejemplo, se detraen partidas que en el proyecto de presupuestos están destinadas a infraestructuras viarias. Tras calcular en 15 millones de euros el coste que tendría para Bizkaibus y 45 millones si se incluye también a Metro Bilbao, el apoderado ha abogado por lograr ese dinero, por ejemplo, de la partida reservada para ejecutar el Guggenheim en Urdaibai. "Tenemos competencias y tenemos el dinero, lo que resta es aplicarlo", ha abogado, para felicitarse de que "el poliamor ha llegado a estas Juntas Generales y eso es una buena noticia".

Por su parte, el socialista Iñaki Jeronimo ha señalado que aceptar las ayudas del 30% que se establecieron desde el Gobierno de Pedro Sánchez era "optativo" y que, así como Euskadi las solicitó, ha habido otras comunidades autónomas que no lo han hecho. "Es hora de que cada uno nos retratemos frente a los descuentos en el transporte público. En Euskadi y en Bizkaia tenemos recursos para ellos", ha planteado. Y es que, a su entender, la recaudación récord permite que las instituciones vascas "destinen dinero público a ayudar a quien más lo necesita", en una situación con la inflación disparada como la actual.

Una situación, ha señalado Jeronimo, similar a la que ya se ha aprobado en el CTB, que al parecer ya ha tomado la decisión de que los billetes del metro seguirán costando la mitad el próximo año.

"Yo invito, tú pagas"

Unai Lerma ha expresado la voluntad del PNV de mantener también el próximo año los descuentos del 50% en el transporte público, debido a la situación económica actual y las consecuencias que tiene para muchas familias del territorio, pero pidiendo la misma responsabilidad a todas las instituciones, incluido el Gobierno español. "Las distintas Administraciones deben seguir vinculadas de la misma forma en estos descuentos; el Gobierno del Estado debe garantizar esas ayudas para cubrir el 30% del billete", ha exigido. "El Gobierno español ha vendido a bombo y platillo unos descuentos que tienen fecha de caducidad, el 31 de diciembre, y a día de hoy no sabemos se los mantendrá en 2023".

De hecho, ha destacado que el PNV en el Congreso de los Diputados ha presentado una enmienda en este sentido en el proyecto de Presupuestos Generales, sin que a fecha de hoy hayan recibido una respuesta por parte del PSOE. "Ojalá me equivoque, pero creo que no prosperará", ha lamentado. "Esto es un 'yo invito pero con tu dinero, con el dinero de todos los vizcainos. El Estado debe seguir aportando ese 30%; ha creado unas ayudas para luego bajarse del plan y obligar a otros a que las mantengan".