El tranvía de Bilbao ganó el año pasado más de medio millón de usuarios, lo que supone que cada día utilizaron este medio de transporte para sus desplazamientos 1.538 más. El incremento en el número de viajeros coincide con la puesta en marcha de la extensión del tren ligero hasta Bolueta, además de con el final de las restricciones en la movilidad impuestas como consecuencia de la pandemia del coronavirus.

Según datos facilitados por Euskotren, el año pasado utilizaron el tranvía de Bilbao 2,6 millones de personas, lo que supone un incremento del 27,23% respecto a los poco más de dos millones de 2021. Así, cada día algo más de 7.100 usuarios utilizan el tren ligero en su recorrido entre Bolueta y La Casilla, pese a que todavía no se han recuperado las cifras prepandemia: en 2019, la demanda superó los tres millones de viajeros, con una media de 8.382 usuarios cada día.

El principal motivo del notable ascenso en el número de viajeros, en opinión de Euskotren, fue la paulatina recuperación de la fuerte caída de la demanda como consecuencia de las limitaciones de movilidad y las reducciones de servicio establecidas durante la pandemia. Aunque el descenso en el número de usuarios fue especialmente notable en 2020, año en el que el coronavirus paralizó el mundo y obligó a la población a confinarse en sus casas, muchas de las restricciones de servicio establecidas por ese motivo todavía estuvieron presentes al año siguiente, aunque ya en menor medida.

Pero también ha tenido su impacto la extensión del recorrido del tranvía hasta Bolueta, ganando dos paradas más –la de este barrio alto de Bilbao y la de Abusu, en las inmediaciones de la ikastola, habilitada precisamente para dar servicio a la comunidad educativa y escolar– desde el 25 de marzo de 2022. Se trata de un recorrido de 2,3 kilómetros de longitud, que el servicio tranviario recorre en algo más de seis minutos que han permitido dar un nuevo impulso a la movilidad ágil y sostenible dentro de la ciudad. Además, se va a construir otra parada intermedia, en el paseo de Los Caños, para dar servicio a los vecinos de la parte baja de Santutxu y en la calle Zamakona. En concreto, la estación estaría ubicada a la altura de la rotonda de la Avenida de Miraflores con Avenida Indalecio Prieto, conectándola con un ascensor.

Los meses de mayor utilización del tranvía por este orden fueron noviembre, octubre y diciembre. Por el contrario, el de menor utilización fue agosto, debido al corte de circulación que se tuvo que realizar entre las paradas de Arriaga y La Casilla durante diez días para llevar a cabo obras de mejora en varias curvas del trazado.

Por paradas, la más utilizada fue Ribera, donde se registran el 9,78% del total de validaciones, seguida de Guggenheim (9,18) y Abandoibarra (9,12%). Solo entre estas tres paradas suman ya más de una cuarta parte del total de usuarios que utilizan el tranvía en la capital vizcaina.