El Athletic, en retroceso en LaLiga tras sumar solo dos de los quince puntos en juego a la vuelta del parón mundialista, encara la visita del Cádiz a San Mamés con la imperiosa necesidad de volver a aliarse con la victoria, algo que no sucede en el campeonato de la regularidad desde el triunfo ante el Valladolid (3-0) el pasado 8 de noviembre. Casi tres meses han transcurrido desde entonces, circunstancia a la que ni mucho menos resulta ajeno Ernesto Valverde, quien espera que el choque frente al conjunto gaditano sirva como punto de inflexión. El duelo, además, coincide con el inicio de una segunda vuelta en la que los leones, derrotados en los tres últimos compromisos ligueros, deberán sumar más de los 26 puntos recolectados en las 19 primeras jornadas para aspirar a una plaza europea a través de LaLiga.

 “Pensamos que tenemos que cortar esta dinámica en la que hemos entrado en liga y queremos que sea un punto de inflexión. Empieza además la segunda vuelta y somos conscientes de que si queremos estar más arriba, tenemos que sumar más puntos”, confesó al respecto en rueda de prensa el de Viandar de la Vera, quien cuestionado por la trascendencia del envite ante el Cádiz señaló que “no puedo decir que sea una final, más que nada porque vamos a jugar una semifinal de Copa dentro de poco, pero sí es un partido vital para nosotros. Igual no lo esperábamos hace poco cuando estábamos en un buen momento de juego y de resultados, pero tampoco es algo que no suceda nunca en otros equipos”.

“Haber dicho antes de empezar la temporada que Europa es el objetivo da lo mismo; es así y está bien”

 “Contra el Celta es verdad que no nos quedamos con buenas sensaciones por el segundo tiempo, sobre todo. No logramos hacernos con el juego, perdimos los duelos y no estuvimos a nuestro nivel”, lamentó asimismo el preparador rojiblanco, que ve aun así “bien de ánimo” a sus futbolistas y es sabedor de que “en el fútbol todo va dependiendo de los resultados, porque hace una semana estábamos preparando la charla para jugarnos contra el Valencia la posibilidad de meternos en semifinales, ganamos y todo el mundo estaba eufórico. Después perdimos en Vigo y todo lo contrario, pero es una prueba de madurez para el equipo estar por encima de todas esas situaciones al haber muchas cosas que tenemos que seguir haciendo como las estamos haciendo”.

 “Tenemos una obligación muy grande que es la de ganar para que nuestra afición esté contenta y todo el mundo esté ilusionado con el equipo. Si no lo logramos, nos duele, y si no nos quedamos con una buena sensación como en Vigo, todavía más”, indicó a su vez un reflexivo Valverde, quien rechaza la idea de que haber fijado públicamente el objetivo de entrar en Europa antes del inicio del curso esté suponiendo una presión añadida para el vestuario, dado que “tenemos un objetivo mucho más ambicioso que ese y es conseguir dar una buena sensación de juego y enganchar a la gente. Siempre estamos hablando además de Europa y haberlo dicho o no antes de empezar la temporada da lo mismo, porque quién no está pensando en eso todos los años antes de empezar la temporada. Es así y está bien”.

 Tampoco teme el técnico que la Copa pueda acaparar la atención en semanas venideras en detrimento de LaLiga en caso de que los puestos europeos continúen alejándose paulatinamente si no llegan las victorias: “Para eso estoy yo y estamos todos aquí dando la matraca y centrarnos en lo que debemos. Son competiciones distintas y la Copa nunca sabes cómo puede ir. Lo que realmente nos dice cómo estamos es LaLiga”. El Cádiz, derrotado en solo uno de sus cinco encuentros ligueros a la vuelta del parón, pondrá a prueba así las cosas a un necesitado Athletic en un partido que poco tendrá que ver con el de la primera vuelta (0-4) a ojos de Valverde: “Este es un Cádiz muy diferente. Están consiguiendo mejores resultados y seguramente sea el equipo que más se ha reforzado en el mercado de invierno; espero un Cádiz que vendrá a hacer su partido y a intentar sorprendernos teniendo jugadores arriba para poder hacerlo”.

UN DARDO

En cuanto al retraso de un mes en la disputa de las semifinales de Copa, el de Viandar de la Vera no se mordió la lengua al afirmar que “ha sido sorprendente, porque en nuestro calendario después de pasar contra el Valencia estábamos pensando en jugar la semifinal esta semana que viene. Fue una cosa de última hora y no estábamos preparados para ello, porque lo normal es conocer las fechas de antemano y creíamos que las conocíamos”.